Empresas y finanzas
La última estafa financiera: "Me decían que tenía 6 millones y no había nada"
- Un afectado: "Se ganan tu confianza a base de llamadas y llamadas"
- "Quise salir y me dijeron que tenía que hacer otras 30 operaciones"
Carlos Jaramillo, Javier Romera
Rentabilidades del 90%. Llamadas continuas para ganarse la confianza del cliente y el gancho de un momento óptimo para operar. Con esta oferta, el chiringuito financiero desmantelado por la policía convencía a unos clientes a los que aseguraba que era una inversión sin riesgo alguno. Según explica uno de los afectados a este diario, en su cuenta virtual llegaban a aparecer 6 millones de euros -invirtió cerca de 500.000 euros-, una cantidad que, sin embargo, nunca existió y que se esfumó prácticamente de un día para otro. | Editorial: Rentabilidad irreal y fraudulenta.
"Se ganan tu confianza a base de llamadas y llamadas. Te hablan como si estuvieses entablando una amistad. Te venden la moto y es fácil picar. No tienes conocimientos y ves que la cuenta sigue engordando", explica Ignacio (nombre ficticio para preservar la intimidad del afectado). El chiringuito operaba a través de múltiples webs que figuraban a nombre de Bali Limited, una sociedad domiciliada supuestamente en Sofia (Bulgaria), pero que no figura inscrita en el Registro Mercantil de este país y que, según advirtió ya en julio del año pasado la Comisión Nacional del Mercados de Valores (CNMV), no estaba autorizada para prestar servicios de inversión. | Qué es un chiringuito financiero y cómo mantenerse alejado.
Exprimir al cliente
De acuerdo con la investigación llevada a cabo por la Policía Nacional, la táctica del chiringuito financiero pasaba por exprimir al cliente hasta que llegase a sus límites. Algo que Ignacio pudo sentir en sus propias carnes. "Te llaman continuamente y a aquel que tiene ganas de invertir se lo comen. No te daban tiempo ni a pensar. Te pedían ingresar dinero en cuentas de Bulgaria, Malta, Croacia... e incluso te animaban a pedir un préstamo", señala el afectado.
Los presuntos estafadores solo simulaban las operaciones, pero la cuenta -ficticia- de los clientes del chiringuito no dejaba de engordar. Al principio las apuestas salían bien y las ganancias se multiplicaban, pero cuando el afectado pretendía sacar su dinero la cosa cambiaba.
Así, cuando Ignacio intentó recuperar el capital invertido y sus ganancias el tono cambió. "A veces te insultaban", explica. En esa operación ficticia de retirada del capital, la casa se llevaba una comisión del 10%, pero cuando llegaba el momento definitivo incitaban a realizar nuevas apuestas para que la cuenta ficticia del cliente se vaciase completamente.
"Exigí retirar el dinero y, de repente, todas las apuestas se perdían. De los 6 millones me dijeron que me quedaban algo menos de 2 millones. Y además te decían que tenías que hacer 30 operaciones más para poder retirarlo. En ese mismo momento comencé a investigar sobre la empresa en Internet y todo el mundo estaba asustado", relata el afectado. De hecho, según apunta Ignacio, las llamadas continuaron hasta hace menos de un mes, cuando recibió el último contacto por parte del chiringuito. "Te llaman y te dicen que vas a volver a recuperarlo todo. Yo conozco afectados que han recibido estas llamadas continuamente", se lamenta.
Una web profesional
El chiringuito usaba como ganchos web -iban apareciendo nuevos dominios a medida que llegaban las advertencias de la CNMV- con un aspecto profesional, en las que se ofrecía incluso invertir en paraísos fiscales y en los que se seguían los movimientos del mercado. Desde la empresa recomendaban al inversor una determinada apuesta sobre una materia prima -como café o maíz- y le apremiaban para que realizase el ingreso de la manera más rápida posible, para evitar perder la oportunidad. Todo era virtual, falso... y el fraude superó los 12 millones de euros.