Abengoa vuelve a luchar por un gran proyecto solar internacional en Dubái
- Compite con Cobra y grupos chinos, saudíes y franceses por la planta
- En alianza con EDF y Masdar, aspira a un contrato de 400 millones
Javier Mesones, Rubén Esteller
Abengoa se prepara para la nueva etapa que abrirá cuando culmine su reestructuración y reciba los más de 600 millones de euros de liquidez que necesita para normalizar su actividad. Debería ocurrir antes del 28 de febrero. Con su cartera de negocio limitada a la tercera parte, el grupo sevillano trabaja para lograr nuevos contratos sobre los que construir la nueva etapa. En este escenario, la compañía que preside Gonzalo Urquijo ha puesto sus miras en uno de los mayores proyectos solares que se adjudicarán en el mundo en los próximos meses. Se trata de la cuarta fase del macrocomplejo solar Mohammed bin Rashid Al Maktoum, en Dubái.
El proyecto, promovido por la Dubai Electricity and Water Authority (DEWA) consiste en la construcción (EPC) de una planta de energía solar concentrada (CSP) de 200 megavatios (MW) de potencia. En el sector estiman que el contrato alcanzará una inversión de alrededor de 400 millones de dólares (más de 370 millones de euros al cambio actual). Abengoa se ha aliado con la francesa EDF y la firma de Emiratos Árabes Unidos (EAU) Masdar. Esta empresa es filial de Mubadala, accionista de BP que acaba fusionarse con el fondo de Abu Dhabi Ipic, propietario de Cepsa.
El de Abengoa, EDF y Masdar ha sido seleccionado junto a otros cuatros consorcios de entre 30 muestras de interés. Entre los finalistas se encuentra la también española Cobra, filial de ACS, que acude a este concurso en solitario. Las dos propuestas con acento español compiten con Acwa (Arabia Saudí) y las alianzas que han conformado la francesa Engie con la china Sepco 3 y la saudí Alfanar con la también china Suncan.
Gransolar, Acciona y TSK
Hace unas semanas, Masdar y EDF visitaron la Plataforma Solúcar de Abengoa, en Sanlúcar la Mayor, Sevilla, con el objetivo de conocer más de cerca el diseño, la construcción y operación, así como la tecnología de vapor y la de sales fundidas de las plantas de tecnología de torre, en las que el grupo andaluz es líder mundial, para poder aplicar este conocimiento en la nueva instalación de Dubái.
El proyecto se enmarca en el programa Visión 2021 de EAU y en el Dubai Plan 2021. La planta, cuya entrada en funcionamiento se prevé para la primavera de 2021, forma parte del macrocomplejo solar Mohammed bin Rashid Al Maktoum. Las previsiones de las autoridades dubaitíes es que esta instalación sumará 1.000 MW en 2020 y 5.000 MW en 2030. Será el mayor parque solar de este tipo en el mundo. Las oportunidades para desarrollar negocio en este segmento en el emirato, por tanto, son enormes.
Las empresas españolas, de hecho, ya han tenido éxito en contratos anteriores al de este parque solar. La asturiana TSK, junto con la saudí Acwa, se adjudicó en 2015 la construcción y operación de la fase dos, que implicaba su ampliación en 200 MW y contabilizaba un presupuesto de más de 300 millones de euros. Entonces, representó el mayor proyecto solar de Oriente Medio. Esta condición recae ahora en la fase tres de la macroinstalación, cuyo contrato ha sido concedido hace escasas semanas a un consorcio liderado por las españolas Gransolar y Acciona Industrial, en el que también participa la italiana Ghella. De hecho, con una potencia de 800 MW (1.054 MW pico), será la mayor planta fotovoltaica del mundo.
La licitación de la tercera fase del complejo solar de Dubái se resolverá, previsiblemente, el próximo mes de mayo. Para entonces, si no hay contratiempos, Abengoa habrá dejado atrás la situación de preconcurso en que se halla desde noviembre de 2015. El viernes, la compañía informó de que finalmente el plan de reestructuración ha recibido el respaldo del 93,97% de los acreedores, después de que en el periodo adicional de adhesiones se haya sumado el 8%.
Los 10 proyectos clave
El objetivo de la ingeniería sevillana es recuperar progresivamente la confianza de los mercados y de los clientes para relanzar su actividad. El grupo tiene señalados 10 proyectos clave repartidos en siete países, México, Chile, Estados Unidos, Perú, Uruguay e India, que pretende poner en valor para venderlos en el futuro y poder enfrentar el pago de la deuda asociada a la nueva liquidez.
En el último año y medio la compañía ha adelgazado su cartera de negocio a prácticamente la tercera parte, tanto por la drástica ralentización en la consecución de contratos como por la pérdida de otros muchos ya adjudicados. Así, Abengoa situaba su cartera en 3.000 millones en septiembre del último curso, frente a los 8.800 millones que totalizaba en el mismo mes de 2015. En los nueve primeros meses de 2016, la firma declaró contrataciones nuevas por 1.000 millones, con obras en países como Omán, Arabia Saudí y Perú, entre otros, así como proyectos de operación y mantenimiento. De resultar ganador, el proyecto de Dubái supondría un fuerte espaldarazo.
En las últimas semanas, la multinacional que preside Gonzalo Urquijo ha informado de la adjudicación de contrataciones menores: tres nuevos proyectos de transmisión y distribución de energía en España y tres contratos de Airbus DS y la Agencia Espacial Europea (ESA) en el sector aeroespacial y defensa.