Empresas y finanzas

Ryanair ultima un pacto con Norwegian e IAG para llenar sus rutas de largo radio

  • Prevé alimentar los vuelos de Aer Lingus a partir de verano

África Semprún

Norwegian, IAG y la islandesa Wow Air han entrado de lleno en la batalla por el low cost de largo radio. Una guerra en la que Ryanair no quiere entrar. Tras la negativa de la aerolínea irlandesa a seguir los pasos de sus competidores y abrir rutas a América se encuentra el objetivo de duplicar su tamaño en el Viejo Continente y consolidarse como la líder del corto radio.

"No vamos a cruzar el Atlántico porque no queremos. Somos una aerolínea europea y queremos focalizarnos en crecer en nuestro mercado. El año pasado trasladamos 117 millones de viajeros y nuestro objetivo es mover 200 millones de aquí a 2024", explicó Kenny Jacobs, director de marketing de Ryanair, a este diario.

Para lograr este ambicioso objetivo, la compañía de bajo coste ha puesto en marcha un plan con dos ejes principales: entrar en los grandes aeropuertos europeos, a excepción de Heathrow (Londres); y firmar acuerdos con las principales aerolíneas para llenar sus vuelos de largo radio.

"Nos vamos a centrar en Europa, que es donde somos los mejores, pero lo que sí que vamos a hacer es trabajar con las aerolíneas de largo radio para facilitar que una persona se levante en Manchester, viaje con Ryanair a Madrid y desde allí vuele a Buenos Aires con Iberia", sentenció Jacobs.

En este sentido, el director de marketing de la compañía irlandesa aseguró que está ultimando un acuerdo de colaboración con Norwegian e IAG para alimentar sus vuelos de largo radio a partir de verano. "Hemos estado negociando durante los últimos seis meses y ahora estamos cerca de cerrar un acuerdo con Norwegian e IAG para alimentar sus vuelos de largo radio a partir del segundo semestre de 2017. Lo haremos con parte de IAG ya que empezaremos con Aer Lingus y también con Norwegian, que va a potenciar sus conexiones con EEUU", concretó Jacobs.

En esta línea, varias informaciones han apuntado a que Ryanair también podría estar negociando un acuerdo con Alitalia para proveer de vuelos de alimentación a su operativa de largo radio y que buscaría llegar a un pacto similar con Iberia, que tiene un modelo de negocio similar con su filial low cost Iberia Express, dentro de acuerdo con IAG.

Y es que, al parecer Michael O'Leary, el consejero de delegado de Ryanair, viajó a Italia la semana pasada para avanzar en las conversaciones con la firma italiana, que pasa por un momento complicado. Aunque la low cost irlandesa no ha querido confirmar oficialmente con qué otras compañías están negociando si que ha asegurado que se encuentra en conversaciones con varias más. Esta estrategia, en la que lleva trabajando varios años, lleva a Ryanair a recrudecer su guerra con easyJet, que también busca entrar en este negocio.

"Mucha gente piensa que es una locura pero ya ocurre en el Norte de América. Un pasajero va de Dallas a JFK -Nueva York- con Southwest y de allí va a Londres con Delta. Y está bien ya que es mucho más eficiente. Lo mismo pasará aquí en unos años", razonó el directo de marketing de Ryanair en un encuentro con este diario. Y es que, la compañía defiende que el modelo de negocio aéreo va a cambiar y que la industria europea se encamina a otro proceso de consolidación, animado por el alza del combustible, que le llevará a replicar el modelo estadounidense.

"Es el momento para que el sector aéreo europeo de el paso al siguiente nivel. Si miras a EEUU, cinco aerolíneas tienen el 90% del mercado y en Europa va a acabar pasando algo parecido. IAG, Ryanair, Lufthansa, EasyJet y otras dos van a dominar el 80% del mercado europeo en los próximos 10 años", sentenció el directivo.

Ryanair explica que su modelo de negocio de corto radio es mucho más eficiente y le permite tener las tarifas más bajas (prevé que caigan otro 10% en tres meses) porque sólo tienen un tipo de avión (Boeing 737) y una operativa muy sencilla. En el otro extremo está el largo radio que necesita distintos aviones, distintas configuraciones y distintas formaciones, lo que dificulta una estructura de costes más eficiente.

"Las aerolíneas tradicionales al final se centrarán más en el largo y dejarán el corto a las low cost para ser más eficientes", explican desde la firma.