Empresas y finanzas

El capital riesgo teme que el impuesto de sociedades aleje al inversor extranjero

  • El sector confía en que el Gobierno resuelva el adelanto del pago lo antes posible

Araceli Muñoz, Rubén Esteller

La decisión del Gobierno de reformar el impuesto de sociedades no ha sido bien acogido por el sector del capital privado, que se ha visto obligado a adelantar la cuantía correspondiente a dicho tributo por los pagos realizados entre octubre y diciembre. Pese a que esta cantidad será devuelta en 15 meses, fuentes del sector consultadas por elEconomista consideran que la medida "ha hecho polvo al sector".

En este sentido, dichas fuentes señalan como principal problema de esta reforma normativa la desventaja que pueden enfrentar los fondos de capital privado españoles frente a los internacionales. "Al final, los grandes inversores extranjeros pueden preferir invertir en un vehículo que esté domiciliado en otro país europeo a uno en España, porque allí no paga impuestos. Esto podría romper el buen ritmo de la captación de recursos de los fondos en España", destacan. "¿Cómo se puede explicar a un inversor extranjero que el fondo necesita dinero no para realizar una nueva inversión, sino para hacer frente al pago de un tributo, pero que en unos meses el Gobierno lo va a devolver? No tiene sentido", añaden.

Por otro lado, otra de las fuentes que tilda de "hachazo" el adelanto del impuesto de sociedades y explica a este diario cómo perjudica en la TIR (tasa interna de rentabilidad). "Si el fondo va bien, hay que comenzar a pagar, lo que perjudica profundamente la rentabilidad de dicho vehículo", denuncian.

Optimismo desde la patronal

El vicepresidente de la patronal del sector del capital privado (Ascri), Juan Luis Ramírez, se mostró optimista respecto a las intenciones del Gobierno de corregir este error regulatorio y confía en que se resuelva a la mayor brevedad posible. Además, hizo hincapié en que no se ha podido corregir antes porque el Ejecutivo está todavía aterrizando, "Ha sido un incidente regulatorio reconocido tanto por el Ministerio de Economía como por el de Hacienda, ya que esta reforma salió en un momento de cambios políticos", explicó el vicepresidente de Ascri a elEconomista.

"Por el momento, la confusión no ha trascendido a los inversores internacionales, pero la situación debe resolverse lo antes posible, porque si se alargara sí podría acarrear problemas al sector del capital privado español", añadió Ramírez, que también es socio de una de las principales gestoras en España, Portobello Capital.