Empresas y finanzas
IAG acusa el 'Brexit': recorta en 1.000 millones la inversión y ganará menos
- Baja un 1% el alza de la oferta de plazas y cancela la incorporación de 34 A320
África Semprún
IAG frena motores ante la incertidumbre generada por el Brexit y la inestabilidad sociopolítica y económica de Europa y América Latina.
La dueña de Iberia y British Airways (BA), que ya ha acusado en sus resultados la futura desconexión de Reino Unido, ha revisado a la baja su plan estratégico 2016-2020 para proteger su rentabilidad y el retorno sobre el capital invertido (ROIC). Así, el holding aéreo, que registró su primera caída de los ingresos entre julio y septiembre de 2016, ha puesto coto al aumento de su capacidad, ha rebajado el plan de inversión y ha recortado objetivo de beneficio operativo (ebitda) para el periodo en un 5,3 por ciento hasta los 5.300 millones de euros anuales. El anuncio ha sentado como un jarro de agua fría entre los inversores, a pesar de que los efectos del Brexit están más que descontados: las acciones del holding han caído un 2,88 por ciento.
Según las nuevas previsiones, IAG invertirá 1.000 millones de euros menos de lo previsto en el periodo tras aplazar la incorporación de nuevos aviones a la flota por el recorte del uno por ciento del crecimiento de la capacidad hasta el tres por ciento de media. "El ajuste en la flota corresponde a la decisión del grupo de frenar el crecimiento de capacidad", explican fuentes cercanas al holding aéreo.
En concreto, la matriz de Vueling y Aer Lingus ha cancelado la incorporación de 34 aviones A320 (corto radio) y de cuatro A340 (largo radio) y ha puesto bajo revisión el calendario de recepción de los Boeing 787 y los Airbus 350 que, según el plan inicial, tendrían que alcanzar las 63 unidades a finales de 2020 (actualmente operan 24 aviones de estos dos modelos). Así, si la multinacional que preside Willie Walsh tenía previsto cerrar 2020 con 421 aviones de corto radio, ahora planea operar 388 aparatos, la mayoría de la familia A320. En el largo radio no hay una cifra definitiva.
Para compensar el freno a la renovación y crecimiento de la flota, IAG ha ampliado la vida útil de algunas aeronaves y ha aprobado una serie de iniciativas para "densificar" los aviones de cara a 2018. Es decir, poner más asientos en cada avión. Con esta medida, IAG se ahorra unos 1.400 millones de inversión que se compensan con los 400 millones que destina a Aer Lingus.
Ante estos ajustes, IAG mantiene en el 12-15 por ciento su objetivo de ROIC y en el 15 por ciento el del crecimiento del margen operativo. El crecimiento medio del beneficio por acción (BPA) se mantiene en el 12 por ciento y el objetivo a largo plazo en la generación de flujo libre de caja para el accionista se queda entre los 1.500 y los 2.500 millones por año. A su vez, la firma no ha modificado su nivel de apalancamiento. "Valoramos favorablemente que la directiva mantenga los objetivos de la compañía a medio/largo plazo cuando gran parte del mercado teme un fuerte impacto negativo por el Brexit", asegura la casa de análisis Renta4.
Iberia pone coto a su crecimiento en Europa
MrEl presidente de Iberia, Luis Gallego, ha asegurado en más de una ocasión que el alza de la oferta de asientos ha lastrado los ingresos por pasajero (yield) de las aerolíneas por lo que "se debería poner coto a la escalada de capacidad". Fiel a este planteamiento, la compañía de bandera ha recortado un 14 por ciento su crecimiento de asiento por kilómetro hasta 2020. En julio de 2015, Iberia aprobó un alza de la capacidad del 7 por ciento que se ha rebajado hasta el 4 por ciento. Así, la nueva estrategia de la compañía, que sigue trabajando en ajustar los costes, se centra en limitar su crecimiento en Europa para mantener los yield, apostar por Baleares y Canarias, firmar alianzas con compañías del grupo para optimizar las rutas, como en el puente aéreo, y condicionar el crecimiento en América Latina a las condiciones macroeconómicas así como apostar por la nueva clase turista premium para elevar ingresos.
Vueling debe reducir su estacionalidad
MrTras el caos generado en El Prat, el futuro de Vueling depende de que consiga mejorar la experiencia del cliente y su operativa. El plan Vueling Next, que contempla un alza de la capacidad del 7 por ciento, busca aumentar la productividad de los empleados optimizando los recursos y la planificación de las tripulaciones. La firma tiene el reto de mejorar la planificación y reducir la complejidad y la estacionalidad del negocio, centrándose en los mercados prioritarios. También quiere aumentar la flota con aviones más eficientes y flexibilizar su uso en función de la demanda. A su vez, buscan mejorar la oferta y la atención al cliente con la incorporación de WiFi, puertos USB, y nuevos sistemas de pago.
British Airways limita su exposición a la libra
MrLa aerolínea de bandera de Reino Unido es la que más está sufriendo los efectos del Brexit por la caída de la demanda premium y el desplome de la libra. Aunque la compañía asegura que ha bajado su exposición a la libra en la última década y que apenas supone el 40 por ciento de sus ingresos, explica que tiene capacidad para reducirla aun más. Para ello, prevé redistribuir la capacidad ofertada y aumentar la disponibilidad de asientos en el extranjero. A su vez, BA va a reducir su clase business para tener más plazas por avión.
Aer Lingus mejorará
MrLa aerolínea irlandesa Aer Lingus todavía está en plena consolidación. Su objetivo es seguir creciendo y potenciar las sinergias con el grupo para reducir costes y aumentar la rentabilidad y vuelos.