Ferrovial entra en la lucha final en EEUU por su mayor contrato del año: una obra de 1.900 millones
- Se enfrenta a Transurban por la autopista interestatal I-66 en EEUU
Javier Mesones
Ferrovial ha entrado en la puja final por el que se erige como el mayor contrato que podría ganar el grupo español este año: el diseño, operación y mantenimiento de la autopista interestatal I-66, en el Estado de Virginia (EEUU).
Con un valor estimado de 2.100 millones de dólares (1.890 millones de euros), la compañía que preside Rafael del Pino se ha unido al 50% al fondo de infraestructuras francés Meridiam, uno de sus aliados habituales con el que este año, sin ir más lejos, sumó fuerzas para llevarse los aeropuertos de Niza y Lyon.
Ferrovial participa en el concurso a través de sus filiales de construcción Ferrovial Agroman y de concesiones Cintra. El consorcio hispano-galo, en el que también participa la firma local Allan Myers, se enfrenta en la final a la alianza que lidera la australiana Transurban, con un 70%, y la sueca Skanska, con un 30%.
De la última fase se ha caído un tercer consorcio que tenía presencia española. Roadis, heredera de las concesiones de Isolux Corsán y propiedad del fondo de pensiones canadiense PSP, integraba una candidatura junto al fondo InfraRed y Fluor Corporation. Previamente, ACS, a través de sus filiales Hochtief, Flatiron y Dragados, también había mostrado interés en hacerse con en este proyecto, pero no superó un corte anterior.
Los dos consorcios finalistas presentaron sus ofertas hace escasas fechas y está previsto que se conozca la resolución por parte del Departamento de Transporte de Virginia (VDOT) a finales de mes, de forma que el cierre financiero se obtenga a mediados del próximo año. El proyecto tiene un plazo de ejecución en la construcción hasta el año 2021, mientras que la concesión alcanza los 50 años. Se trata, según fuentes del sector, de uno de los mayores proyectos de carreteras que se adjudican este año en el mundo.
Financiación
El proyecto estará financiado a través de bonos de actividad privada por un importe de 946 millones de dólares (860 millones de euros), así como con un préstamo TIFIA, del Departamento de Transporte Federal Estadounidense, por 800 millones de dólares (727 millones de euros). El Gobierno del Estado de Virginia, por su parte, aportará un máximo de 600 millones de dólares (545 millones de euros). KPMG actúa como asesor financiero del VDOT y Hunton & Williams se encarga de la parte legal.
El proyecto contempla la remodelación de un tramo de la I-66, de forma que mejore la movilidad en la autopista interestatal, reduzca el tiempo de viaje y aumente la seguridad en la vía.
Afianzarse en EEUU
Con este proyecto, Ferrovial pretende reforzar su presencia en EEUU, después de vender en 2015 la Indiana Toll Road (ITR) al fondo IFM por 5.725 millones de dólares (5.330 millones de euros) y la Chicago Skyway a un grupo de fondos canadienses OMERS, Canada Pension Plan Investment Board y Ontario Teachers Pension Plan) por 2.836 millones de dólares (unos 2.600 millones de euros).
Ferrovial actualmente opera la autopista Lyndon B. Johnson (LBJ Expressway), que ha requerido una inversión de 2.300 millones, y la autopista North Tarrant Express (NTE), con casi 1.600 millones invertidos.