Empresas y finanzas

Mercadona e Ikea piden a la UE que rebaje las emisiones de los camiones

  • Exigen estándares más eficientes para descarbonizar el transporte
Tienda de Mercadona en Vitoria. <i>Imagen de Óscar Garrido</i>

Rubén Esteller

Un grupo de 19 empresas, encabezado por Mercadona, Ikea, Nestlé y Philips, entre otras, han enviado una carta al presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, en la que piden que se adopten medidas para reducir las emisiones de CO2 de los camiones.

Este grupo, en el que aparecen también gigantes internacionales como Deutsche Post, DB Schenker o Colruytgroup, instan a la UE a utilizar la próxima comunicación sobre "descarbonización del transporte" para la introducción de normas de eficiencia de combustible para camiones nuevos y remolques y a la vez introducir legislación dentro de los próximos dos años.

Los camiones son responsables del 25% del consumo de carburante en las carreteras y de las emisiones de carbono, pese a que apenas representan al 5% de los vehículos en circulación. Por ese motivo, este grupo de empresas considera que los objetivos de la Unión Europea para 2030 requieren mayores esfuerzos. En opinión de estas compañías, la introducción de un test de CO2 y una monitorización de las mismas no son suficiente para iniciar un cambio en el mercado hacia carburantes más eficientes.

Así, por lo tanto, Mercadona y sus compañeras de viaje piden que se siga el ejemplo de Japón, China y de Estados Unidos donde se ha logrado incluir sistemas para alcanzar una mayor eficiencia, ya que las empresas y los consumidores de todos los sectores de la economía dependen de los camiones para mover materiales y productos.

Coste del combustible

Según se desprende del texto de la carta, al que tuvo acceso elEconomista, el combustible es el coste más importante en el transporte pesado. Un camión con remolque tiene un coste de 35.000 euros por año en carburante y consumen alrededor del 60% de todo el combustible para camiones en Europa.

Estos costes se transfieren luego a los consumidores mediante un mayor precio de los productos. Por este motivo, aprovechar el potencial de ahorro del 35% podría ahorrar a las empresas hasta 10.000 euros por año y camión, evitando al mismo tiempo 37 millones de toneladas de carbono se emiten al año 2030.

Este grupo de empresas, muy centrado en el negocio de la distribución, cree que incluir estándares de eficiencia en los carburantes ahorrará dinero y reducirá la dependencia y volatilidad de los precios del petróleo.