Empresas y finanzas

La hucha de la banca para litigios sube un 5,86% y roza los 4.000 millones

  • Se trata del primer aumento de estas provisiones desde 2017

Eva Contreras

La banca vuelve a reforzar la hucha para encarar potenciales reveses judiciales o fiscales cuando parecía que la fuerte litigiosidad de los últimos años, vinculada sobre todo a hipotecas, había quedado casi atrás. Los seis mayores bancos -Santander, BBVA, CaixaBank, Banco Sabadell y Bankinter- aumentaron en un 5,86% este tipo de dotaciones el pasado año y elevaron la hucha conjunta a 3.999 millones de euros.

Supone añadir 221 millones a los 3.778 millones que tenían en 2020 y el primer repunte en el aprovisionamiento de estas redes de seguridad desde 2017, cuando la cuantía superaba los 5.238 millones.

Desde entonces ha menguado en casi 1.240 millones, en parte por la resolución de procedimientos que justificaban mantener reservas y en parte porque en 2020 los tribunales se vieron afectados por la pandemia, con la consiguiente reducción de los fallos judiciales -la hucha mermó casi un 21% durante el ejercicio-.

El refuerzo del pasado año coincidió con un auge en las reclamaciones que llegaron a la ventanilla de la banca y a las del Banco de España. Hasta septiembre el supervisor había tramitado 26.719 quejas, cifra que ya excedía en unas 5.000 a todo el año 2020 y se acercaba a los ejercicios de mayor conflictividad.

Aunque no son cuestiones asimilables por completo, sí da una pista de la potencial litigiosidad ya que muchos de los conflictos que no se ventilan ahí con satisfacción para el cliente acaban en los tribunales.

El grupo con mayores provisiones es Santander, con 1.996 millones

Los procesos judiciales tardan además un tiempo largo en sustanciarse, de manera que podrían materializarse ahora riesgos legales que vienen de atrás. Aún quedan procesos sobre cláusulas suelo y gastos hipotecarios por dilucidar, a los que se une una mayor conflictividad en las tarjetas revolving tras la resolución del Tribunal Supremo de 2020, avalado por el Tribunal de la Unión Europea en 2021.

Por entidades, el grupo con mayores provisiones es Santander, con 1.996 millones al cierre de 2021, aunque dista de los casi 3.200 millones que tenía en 2017. El banco, que solo acopia hucha para aquellos procesos donde ve un riesgo de pérdida probable, encara litigios y disputas fiscales en diferentes geografía. Las más abultadas se encuentran en Brasil, por disputas laborales, fiscales; y en Reino Unido, por la venta de seguros de protección de pagos.

Solo el pasado año amplió, de hecho, en 323 millones las dotaciones para procesos laborales y de naturaleza legal en Brasil, tras haber hecho pagos en el país por valor de 494 millones por ambos conceptos; en Polonia agregó 319 millones para cubrir la cartera de hipotecas en francos suizos y en Reino Unido 69 millones para el bank levy. Su hucha incluye la indemnización al consejero delegado de UniCredit, Andrea Orcel, por frustrarse su fichaje -pedía 112 millones y el juez le ha reconocido 51,4 millones- y no figuran eventos como la demanda de Universalpay, que le reclama 1.050 millones.

Entre los eventos que cita CaixaBank figuran diferentes procesos heredados de Bankia

BBVA tiene 533 millones para contingencias legales y 90 millones para otras de carácter fiscal que no desglosa en su informe anual. Sobre la investigación abierta en la Audiencia Nacional por el 'Caso Cenyt', se limita a detallar que, al estar en fase de instrucción, "no es posible predecir" ahora su ámbito o duración "ni todos sus posibles resultados o implicaciones para el grupo".

Entre los eventos que cita CaixaBank figuran diferentes procesos heredados de Bankia, como los fallos que puedan producirse en favor de inversores institucionales que acudieron a su OPS o derivados de operaciones societarias o inversiones de filiales como Habitat o Banco de Valencia, además de potenciales impactos por 'cláusulas suelo' o tarjetas revolving. Bankinter no detalla procesos y Banco Sabadell cuenta con 28 millones en provisiones para contingencias legales o 114 millones para cláusulas suelo, aunque considera que son legales porque se vendieron con la exigida transparencia.

19.000 millones

Es el coste que tuvieron que asumir las entidades financieras entre los años 2014 y 2020 por "fallos en el cumplimiento de obligaciones con clientes o el diseño de productos", según el Banco de España. Incluye resarcimientos por acuerdos con clientes o fallos judiciales. A lo largo de esos años encararon, entre otros, grandes procesos por las participaciones preferentes, cláusulas suelo y gastos hipotecarios o el IRPH.