El "Juego de Tronos" del streaming: la historia de cómo HBO podría haberse convertido en Netflix
- En 2005, la cadena se planteó vender suscripciones por internet
- Un año después, barajaron la opción de comprar Netflix
elEconomista.es
Para muchos mortales, es inevitable echar la vista atrás y preguntarse qué habría pasado si, en lugar de elegir "a", hubiera escogido "b". En el mundo de los negocios sucede lo mismo, como bien sabe HBO, cuyas decisiones pasadas podrían haber impedido que cadena por cable se convirtiera en lo que es hoy Netflix. A continuación, la historia de lo que pudo ser y no fue.
Año 2005, un grupo de ejecutivos de la legendaria cadena HBO, responsable de series como Los Sopranos, The Wire o Sexo en Nueva York, presiona para vender suscripciones directamente a los consumidores a través de internet, relata el periodista James Andrew Miller en Tinderbox: HBO's Ruthless Pursuit of New Frontiers. Obviamente, pierden la contienda.
Un año después llega el momento que podría haber cambiado la historia de las plataformas streaming. Los ejecutivos de HBO se plantean comprar Netflix, cuyo valor en aquel momento ronda los 1.000 millones de dólares y todavía se dedica al alquiler de DVD por correo. Evidentemente, esto tampoco sucede y el resto de la historia es de sobra conocida: en 2013, Netflix revoluciona el negocio de las series con el lanzamiento de House of Cards y, ahora, no solo vale unos 300.000 millones de dólares sino que, además es la compañía que las demás buscan imitar.
No obstante, como se suele decir, es fácil predecir el futuro una vez ha pasado. Tal como señala Miller al medio estadounidense Vox, incluso si HBO y Time Warner, su empresa matriz en 2005, hubieran tomado la decisión de lanzar su propia plataforma streaming, ésta podría haber sido un fracaso total y absoluto, ya que muy pocos hogares tenían internet de banda ancha por aquel entonces. Además, hay que tener en cuenta el poder de decisión que tenía en ese momento la industria de la televisión por cable de la que dependía HBO.
Con la compra de la plataforma de streaming un año después podría haber sucedido lo mismo. Netflix es la compañía que es hoy por las decisiones que tomó en el pasado cuando era un pequeño actor en el vasto mar de la industria del entretenimiento, unas decisiones muy distintas a las que podría haber elegido de haber contado con el respaldo de un gran conglomerado.
Al final, la plataforma de streaming que quería convertirse en la legendaria cadena de televisión de pago, superó a la maestra. HBO lanzó su propio servicio, inspirado en Netflix, en 2015 y, desde entonces, lucha por seguir su ritmo y el de otros competidores como Disney+, Peacock y Amazon Prime Video.
Golpe legal a Netflix
La futura Ley General Audiovisual del Ministerio de Asuntos Económicos incluirá una cláusula que permitirá a los productores españoles recuperar los derechos de autor de sus series pasados cuatro años. Esto supone un duro golpe para los gigantes audiovisuales como Netflix, que verá mermado su poder frente a las compañías locales.
Se establecerá la figura del productor-creador, según publica THE OBJECTIVE. De esta manera, se establecerá la reversión de derechos para sus series y productos en un plazo de 48 meses desde su venta o cesión.
Desde el 1 de enero de este año, Netflix declara en España todos los ingresos que generados en el país. Hasta el momento, la plataforma de streaming sólo tributaba lo generado a través de sus filiales, Los gatos entretenimiento España y Netflix Servicios de Transmisión España. En 2020, ambas duplicaron sus ingresos hasta superar los 46 millones de euros, una cifra que se espera se multiplique de nuevo en 2021.