Empresas y finanzas

De Cos teme el cierre de crédito en la banca por el deterioro de los balances

  • La negativa del sector a usar los colchones de capital podría alentar este riesgo
  • Santander apuesta por el consumo para reactivas la economía
  • Sabadell defiende invertir ahora para lograr ahorros de costes después
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos.

Eva Díaz

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, aseguró esta mañana que aún hay muchas incertidumbres a futuro para salir de la actual crisis. Durante su intervención en las jornadas bancarias organizadas por el IESE, apuntó a que aún existe el riesgo de que la crisis pase a convertirse en financiera y acabe con una restricción del crédito por parte de la banca. A su juicio, la combinación del riesgo de crédito junto con la reticencia de las entidades a utilizar los colchones de capital, ante el miedo de que esto pueda penalizarlas en el mercado, "podría llevar a la restricción del crédito". Algo que, matizó, de momento no se está produciendo pero que "no deja de ser un riesgo potencial hacia el futuro".

El gobernador, asimismo, señaló que de momento ya se ven notables deterioros en la calidad crediticia. De un lado, los créditos en vigilancia especial se incrementaron un 25% a lo largo de 2020 y, si se mira desde marzo, el alza ha sido mayor, de un 37%. Además, las refinanciaciones, aunque aún siguen en tasas de crecimiento interanual negativas, caen menos, pasando de descensos del 20% a, tan solo, del 2%. Finamente, también se ven alertas rojas en el segmento del crédito al consumo, cuya cartera de dudosos ya ha crecido un 23%.

En la misma línea, De Cos aseguró que uno de los segmentos más problemáticos, son los créditos avalados por el ICO. "Han ido a las empresas con más riesgo, menos solvencia y mayores problemas de liquidez", dijo. "Podría producirse un deterioro futuro en ese segmento", añadió. Además, también cree que podría haber deterioros crediticios en algunas de las moratorias que ya han vencido. "Los incrementos de la mora están por encima del 20%", avisó.

No obstante, de cara al daño de los balances de las entidades, aseguró que el impacto será desigual, porque la exposición de cada entidad a los sectores más golpeados varía mucho. Aunque el 20% de los balances bancarios está expuesto a las actividades que más problemas han tenido durante la pandemia, las compañías más afectadas son las pymes, y en este caso, el peso de cada banco a estas pequeñas y medianas empresas es distinto, así como su distribución geográfica.

Según las proyecciones macroeconómicas del Banco de España, el PIB crecerá este año un 6,2%, un volumen algo superior al 6% estimado en el trimestre anterior. No obstante, el supervisor considera que no se alcanzará el nivel de PIB previo a la crisis hasta finales de 2022. Estas previsiones están calculadas, siempre y cuando los ansiados fondos europeos (a los que a España le corresponden 140.000 millones) cumplan bien su función y se destinen a potenciar la productividad de las empresas y mejorar el mercado laboral.

Mantener los alivios

El gobernador apuntó que, aunque los riesgos ahora son menores que al inicio de la pandemia, aún existen. De hecho, del lado del consumo privado, tras el alto incremento de ahorro visto durante el coronavirus, aún existen dudas de cómo va a responder. Aunque inicialmente se ve como un empuje a la recuperación de la economía, De Cos apuntó que el mayor ahorro se ha concentrado por parte de las rentas altas que son menos propensas al consumo.

El gobernador asegura que las proyecciones realizadas para la economía dependen del mantenimiento de las medidas monetarias, fiscales y los alivios puestos en marcha durante la crisis. "El mantenimiento de las medidas de apoyo es necesario, aunque más focalizado en los sectores o grupos poblacionales más afectados", dijo. Respecto a la política fiscal, apuntó que es muy importante que se diseñe un programa de consolidación fiscal que permita recuperar márgenes de maniobra para potenciales crisis. "Aunque no sea el momento de implementarla, el diseño debe anticiparse porque las ganancias en términos de credibilidad pueden ser muy importantes", dijo.

El consumo, clave

El consejero delegado del Santander, José Antonio Álvarez, señaló durante su intervención en las jornadas bancarias organizadas por el IESE que confía en una pronta recuperación de la economía empujada por el mayor consumo privado. A diferencia del gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, que mostró sus dudas en cómo se utilizará el exceso de ahorro que ha habido durante la pandemia, Álvarez apuntó que los mayores niveles de ahorro se trasladarán al consumo, "y éste es el empujón que estamos viendo en la economía".

Por otro lado, el consejero delegado del grupo cántabro señaló que la calidad crediticia de las familias, es mejor que la esperada hace un año, porque el nivel de desempleo y el precio de la vivienda han evolucionado mejor de lo que se creía doce meses atrás. No obstante, en el mundo de la empresa, aún es pronto, hay que esperar unos cuanto trimestres para ver con qué fuerza salen. "De esta crisis, los gobiernos y las empresas salen con mucha más deuda, no así los particulares", dijo.

Por su parte, el consejero delegado del Sabadell, César González-Bueno, consideró que la actual crisis ha llevado a un proceso de digitalización muy profundo y simultáneo en todos los países, y reflejo de ello es que desde el primer trimestre de 2020 al primer trimestre de 2021, las transacciones físicas en las oficinas han caído un 60%.

González-Bueno señaló que esta transformación digital, que también está llevando a cabo el banco que encabeza, va a hacer al sector más rentable, y va a llegar por parte de los ingresos, simplificando la oferta al hacerla más digital, y de los costes. De este lado, señaló que para reducir costes hay que invertir a corto plazo, aunque sus efectos se vean en una media de tres años. No obstante, aseguró que el esfuerzo en este ámbito es "imprescindible". Finalmente, sobre el objetivo que se ha marcado Sabadell en su nuevo plan estratégico de alcanzar un ROTE del 6% de cara a 2023, señaló que esa posición no es punto de llegada, sino un hito intermedio en una recta que, espera, les llevará más allá.