Pepa Muñoz (Facyre): "Sumamos 1.500 demandas para exigir que el Estado indemnice a la hostelería"
- La presidenta de la Federación de Cocineros alerta de más cierres
- Mario Sandoval o Elena Arzak han acudido también al Supremo
Sandra Acosta, Javier Romera
Más del 50% del total del negocio. Es lo que han perdido miles de pequeñas y medianas empresas dedicadas al sector de la hostelería a causa del cierre forzoso al que se vieron obligadas durante el Estado de Alarma decretado el 14 de marzo del año pasado y las posteriores restricciones que han ido aprobando las comunidades autónomas. La hostelería, locomotora tradicional de nuestra economía, se ha convertido así en uno de los sectores más castigados por el coronavirus.
Pepa Muñoz, presidenta de Facyre (Federación de Asociaciones de Cocineros y Reposteros de España) y dueño del restaurante El Qüenqo de Pepa explica que más de 1.500 bares y restaurantes de toda España se están sumando, a través del despacho de abogados Cremades &Calvo-Sotelo, para demandar al Estado a título individual.
"A la iniciativa se han unido desde chefs muy reconocidos como Mario Sandoval o Elena Arzak, Juanjo López, de La Tasquita de Enfrente, Iñaki López de Viñaspre, de Sagardi o Begoña Fraire, de Étimo, entre otros, hasta pequeños bares y restaurantes, en incluso un Ayuntamiento de Soria", explica Pepa Muñoz.
El 75% de la facturación
"En la demanda nos estamos basando en el modelo alemán para reclamar el 75% de la facturación media de los últimos 3 años. Todo esto con el fin de que vean que es real. Nosotros teníamos un negocio, que estaba funcionando y el cierre nos ha obligado a paralizar la actividad. No queremos que nos den el dinero porque sí. Estamos alrededor de 1.500 con demanda firme, pero quedan muchísimos casos por analizar. Diariamente solemos tener entre 60 y 70 llamadas", comenta la chef.
"Para empezar, los ERTEs en nuestro sector no son reales, al menos no como pueden ser en otros sectores, ya que la seguridad social de los empleados en esta situación la estamos pagando los hosteleros. Una vez dicho esto, nosotros somos conscientes de la problemática que hay, ante todo hay una pandemia y la salud de todo el mundo es lo más importante, pero, si cierran tu local y no te dejan trabajar, te tienen que ayudar. Hemos recurrido a la justicia porque estamos en un país desarrollado, establecido como una democracia, y nuestra constitución protege el derecho al trabajo. Si tienen que cerrarnos, como en el caso de otros países europeos, con medidas mucho más restrictivas, que lo hagan pero que nos ayuden", responde.
Ayudas
Según los últimos datos del 14 de enero, sólo el 24% del total de las Comunidades Autónomas han recibido parte o la totalidad de las ayudas asignadas a los hosteleros. Por parte de Facyre desconocen los datos reales de esto, al igual que la cantidad que va a ser destinada a cada negocio. "Se ha hablado, pero no se ha hecho efectivo. El único sitio que figura como que han recibido algo es Valencia y al hablar con amigos y hosteleros valencianos me han dicho que de momento no han recibido nada", dice.
La consecuencia es que el sector ha destruido ya un millón de empleos y uno de cada tres negocios cierra ha cerrado. "Y es prácticamente imposible que vuelvan a abrir. No es que sea importante, es que es urgente que haya ayudas porque en caso contrario mañana mismo cerrarán más negocios y en el plazo de 6 meses pueden llegar a cerrar 100.000 más. Es una barbaridad. Todo esto afecta a muchísima más gente, como por ejemplo proveedores" , destaca Muñoz.
El reparto de comida a domicilio no está siendo una solución suficiente para muchos negocios
Tal y como ha dictaminado el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, la dueña de El Qüenco de Pepa niega que la hostelería sea una fuente de contagios. "Según varios estudios, los contagios en los restaurantes rondan entre un 2 y un 2,3%. ¿A qué hora nos contagiamos? Es muy difícil saberlo. Las medidas están bien tomadas siempre y cuando cada hostelero cumpla con ellas, ya que de cierto modo actuamos incluso de rastreadores con las reservas, sin mencionar el uso de mascarillas, la toma de temperatura, etc... pero está claro que así no podemos salir adelante, no es suficiente".
En cuanto a la vacunación de los camareros, es decir, empleados que están en contacto directo con los clientes, Pepa Muñoz asegura que "veo bien que se les vacune o, al menos, que se les incluya en los siguientes grupos a vacunar, después del personal sanitario claro está y los grupos prioritarios. Todo a su tiempo y en su turno correspondiente".
Reparto a domicilio
La presidenta de Facyre señala, por otro lado, que para muchos negocios el reparto de comida a domicilio o delivery tampoco está siendo la solución esperada. "Por desgracia no funciona para todos por ser muchos entre los que elegir", advierte. La única salida así son las ayudas directas.