Atlantia, dueña de Abertis, pone a la venta los puentes con peaje de Lisboa
- Nueva oportunidad en Portugal para las concesionarias españolas y los fondos
Javier Mesones
Atlantia, la dueña de Abertis, ha puesto a la venta su participación en Lusoponte, la concesionaria que explota los emblemáticos puentes con peaje que cruzan el río Tajo en Lisboa, según indican a elEconomista distintas fuentes financieras. El Banco Santander asesora el proceso.
Se trata del Puente del 25 de Abril y del Puente Vasco de Gama. El grupo italiano ofrece así una nueva oportunidad para las concesionarias españolas, como Abertis, Globalvia y Roadis, cuyo interés por Portugal es elevado. No obstante, al tratarse de una posición minoritaria, es previsible que el mayor apetito provenga de fondos de infraestructuras y de pensiones o que incluso los socios de la firma transalpina en Lusoponte, la portuguesa Mota Engil y la francesa Vinci, puedan reforzar sus posiciones ejerciendo derechos de tanteo.
Atlantia encaja esta desinversión en la estrategia de rotación de activos maduros para hacer caja y tener capacidad para nuevos proyectos
Atlantia encaja esta desinversión en la estrategia de rotación de activos maduros para hacer caja y tener capacidad para nuevos proyectos. Controla, a través de su filial Autostrade, el 17,21% de Lusoponte, sociedad en la que Sacyr estuvo presente años atrás a través de la portuguesa Somague. Lineas-Concessões de Transportes, de Mota Engil, encabeza el accionariado con el 41,81% y Vinci el 40,98%. Ambas compañías subieron sus posiciones en 2018 cuando compraron el 7,5% de Teixeira Duarte por 23,3 millones de euros.
Lusoponte explota los peajes de los dos principales puentes de Lisboa, cuya concesión finaliza, en ambos casos, en 2030. El Puente del 25 de Abril fue inaugurado en 1966 con el nombre de Puente Salazar, pero cambió tras la revolución de los Claveles en 1974. Con 2,27 kilómetros de longitud y una altura máxima de 70 metros, es uno de los puentes colgantes más grandes del mundo. El número de vehículos diario que lo atraviesa supera los 130.000 y también incorpora una línea ferroviaria. En 2018, un consorcio liderado por Sacyr se hizo con el contrato para su rehabilitación. Mientras, el Puente Vasco de Gama, inaugurado en 1998 y con 17,3 kilómetros de longitud, es el segundo puente atirantado más largo de Europa y tiene capacidad para 50 millones de vehículos al año.
Con la venta de su participación en Lusoponte, Atlantia saldrá de Portugal, un mercado que en todo caso se mantiene en el radar del grupo
Con la venta de su participación en Lusoponte, Atlantia saldrá de Portugal, un mercado que en todo caso se mantiene en el radar del grupo. No en vano, Abertis, de la que tiene la mayoría del capital con el 50% más una acción -ACS ostenta el 30% y su filial alemana Hochtief el 20% menos una acción- formó parte el pasado año de la terna final de aspirantes a hacerse con el control de Brisa.
Abertis figura entre los potenciales compradores de la participación de Atlantia en Lusoponte que mencionan en el mercado, aunque las fuentes consultadas diluyen el interés de la compañía española, que en este momento está centrada en consolidar las dos adquisiciones realizadas en 2020 por más de 2.000 millones de euros, la mexicana Red de Carreteras de Occidente (RCO) y su primer activo en Estados Unidos, Elizabeth River Crossings.
Además, la estrategia de Abertis discurre por comprar compañías o vías con una posición de control para liderar la gestión. La misma filosofía tiene Globalvia, con una presencia destacada en el país. Roadis también opera varias autopistas. En este escenario, los fondos de infraestructuras emergen como principales candidatos. Entre los más activos figuran Vauban, Meridiam, TIIC, 3i, Aberdeen o DIF.
9.500 millones de euros
El Gobierno italiano lanzará a finales de febrero una última oferta para la compra a Atlantia de ASPI, la concesionaria de autopistas en Italia, que el grupo tiene que vender como consecuencia del derrumbe del puente de Génova en 2018. El precio ofrecido hasta ahora se estima en una horquilla de entre 8.500 y 9.500 millones de euros.