Empresas y finanzas
easyJet asume que los aviones irán con menos plazas para volver a volar
- Plantea reducir hasta un 30% su flota actual en el peor escenario de demanda
- Logra 2.000 millones extra y tiene liquidez para sobrevivir un año parada
África Semprún
El Gobierno está trabajando en un plan de transición para que la gente recupere poco a poco la libertad de movimiento y así evitar un repunte de contagios de coronavirus. Entre las medidas que se estudian en encuentra la de mantener la distancia social en los medios de transporte en una primera etapa y la de generalizar los controles sanitarios en aeropuertos y estaciones en una segunda.
Aunque todavía no hay nada decidido y no sabe cuánto durará "el paréntesis de la transición" las aerolíneas ya trabajan con el escenario de tener que volar con los aviones medio llenos para poder reactivar las operaciones. Así lo ha planteado el consejero delegado de easyJet, Johan Lundgren, que asume que tendrán que dejar asientos vacíos en las filas para mantener las distancias de seguridad, tal y como se ha impuesto en España durante el estado de alarma.
"Suponemos que los factores de ocupación no volverán a la normalidad desde el principio, lo que significa que tendremos que bloquear el asiento de en medio"
"Suponemos que los factores de ocupación no volverán a la normalidad desde el principio, lo que significa que tendremos que bloquear el asiento de en medio, pero estoy hablando de esto como una fase inicial y nadie sabe durante cuánto tiempo se tendrá que aplicar", aseguró el primer espada de la compañía.
Esta limitación implica que los aviones tendrán que volar con el 33% de sus plazas vacías, lo que elevará muchos los costes unitarios dificultando rentabilizar las operaciones en una primera fase en la que la demanda, además, será mucho más baja. En EEUU, firmas como Delta han implantado la política de dejar el asiento de en medio vacío para garantizar la distancia social pero en España o Francia se ha ido un poco más allá y sólo se permite vender un tercio de los asientos disponibles en trenes, autobuses y aviones, lo que hace inviable el servicio.
Si la limitación de las capacidades de los aviones o la restricción de la movilidad de la población de más edad se mantiene en el tiempo, las compañías aéreas tendrán problemas para sobrevivir y se podría ver un entorno de precios un poco más altos, aunque las subidas se verían limitadas por la baja demanda. No en vano, apenas un 33% de las compañías son rentables, según datos de IATA.
Una aerolínea más pequeña
El sector aéreo afronta un periodo de incertidumbre pero ya está se preparando para la crisis económica que va a seguir a la pandemia del coronavirus. Así, las compañías están reduciendo su tamaño con la previsión de que la demanda no recuperará los niveles de 2019 hasta finales de 2021 o 2022. La firma de banca de inversión Cowen prevé que las aerolíneas de EEUU sean un 33% más pequeñas y que el mercado doméstico tarde en recuperarse entre unos tres años mientras que el internacional no volverá a los niveles precoronavirus hasta 2024.
Con este panorama de mayor debilidad, easyJet ha reestructurado su plan de crecimiento con el retraso de las entregas de 24 aviones, la suspensión de acuerdos de leasing y la venta de aeronaves. Así, la aerolínea prevé cerrar 2020 con una flota máxima de 342 aviones frente a los 352 estimados antes de la crisis. En 2021, la flota máxima de la compañía sería de 332 unidades frente a los 354 recogidos en el anterior plan y la mínima sería de 302. En 2023, la horquilla de la flota prevista se mueve entre los 281 y los 353 aviones frente al rango de entre 304 y 383 de antes de la crisis, lo que implica que en el escenario más pesimista, la flota de easyJet se reduciría un 31% entre 2019 y 2023.
Recorta un 8% su objetivo de flota máxima para 2023 por la menor demanda
Recortar el tamaño de la flota y retrasar la recepción de los aviones forma parte del plan de reducción de costes que la compañía ha puesto en marcha para sobrevivir a la crisis y mantener su tejido productivo para poder volver a operar. easyJet ha conseguido recortar sus gastos semanales de los 130 millones de libras a los 30-40 millones fijos, lo que implica que con la liquidez de la que dispone ahora mismo podría sobrevivir un año sin operar. Es decir, con todos los aviones en tierra. Y es que, la firma ha ejecutado un programa de financiación que agregará casi 2.000 millones en fondos adicionales, fortaleciendo su posición de liquidez.
easyJet espera tener unas pérdidas recurrentes antes de impuestos en su primer semestre fiscal entre los 185 y 205 millones de libras, lo que representa una mejora en relación a las pérdidas antes de impuestos del ejercicio de 2019, que ascendieron a 275 millones."El rendimiento de nuestro primer semestre, previo al impacto del coronavirus, fue muy sólido, lo que demuestra la fortaleza del modelo comercial de easyJet".