ACS compensa con ventas el impacto de Cimic y eleva su beneficio un 5,1%
- Gana 962 millones y se queda así a las puertas del objetivo de los mil millones
Javier Mesones
ACS se ha quedado a las puertas del objetivo largamente buscado de los 1.000 millones de euros de beneficio. Un reto frustrado a última hora por el impacto neto del cierre de operaciones en Oriente Medio de su filial australiana Cimic, con un efecto negativo en el resultado de 400 millones de euros. Un golpe compensado con los resultados obtenidos por las desinversiones de activos de energía renovable en el año y la aplicación de una provisión por riesgos internacionales. Todo ello ha propiciado que el grupo que preside Florentino Pérez se haya anotado un incremento del 5,1% del beneficio, hasta alcanzar los 962 millones de euros.
ACS anunció hace escasas semanas que Cimic no continuaría prestando apoyo financiero a su participada en Oriente Medio BICC (Dubai BIC Contracting). Esta decisión y el efecto negativo de 400 millones ha prácticamente borrado las plusvalías logradas por las desinversiones realizadas en 2019. Entre ellas figuran la de sus plantas solares en España a Galp por 750 millones y una ganancia de 330 millones y la de varias autopistas en España, Canadá y Estados Unidos.
ACS ha mejorado en todos sus negocios. Así, el beneficio neto recurrente en la división de infraestructuras creció el 4,6%, hasta 613 millones. Un incremento sustentado en sus concesiones (+38,3%) tras la incorporación de Abertis desde el mes de junio de 2018, cuya contribución en 2019 alcanzó los 245 millones de euros, frente a los 175 millones en el periodo anterior.
El ascenso en el ámbito concesional contrarrestó ampliamente el retroceso del área de construcción, del 10,9%, como consecuencia del cambio de participación de la empresa en Hochtief, la filial alemana en la que ha pasado de tener el 71,8% al 50,4% tras la venta a Atlantia en el último trimestre de 2018 en el marco de la oferta pública de adquisición (opa) sobre Abertis. Sin considerar este efecto el crecimiento es de un 10,1%.
Mientras, el área de servicios industriales ganó un 7,8% más en el último ejercicio, hasta 350 millones, y la de servicios se apuntó 38 millones, un 3,3% más.
El peso de EEUU
El resultado bruto de explotación (ebitda) de ACS alcanzó los 3.148 millones en el último año, con un incremento del 7% con respecto a 2018. La multinacional española que dirigen el también presidente del Real Madrid y el consejero delegado Marcelino Fernández Verdes pulverizó en 2019 su récord de ingresos al superar por primera vez los 39.000 millones (39.049 millones, un 6,5% más).
Por países, Estados Unidos acapara el 43% de la cifra de negocio de ACS a nivel global, por delante de Australia, con el 19%, España, con el 14%, Canadá, con el 4%, y Alemania, con el 2%.
Por su parte, la cartera se situó en 77.756 millones, un 7,7% más. Estados Unidos abarca el 36% de la carga de trabajo futura, seguido de Australia, con el 25%, España, con el 10%, Canadá, con el 5%, y Alemania, con el 4%.
Deuda de 54 millones
Durante 2019, ACS redujo sus inversiones netas un 18,5%, hasta los 1.254 millones, de los que la mitad corresponden a maquinaria para proyectos y el resto al ámbito financiero. El grupo pasó de una caja neta de 3 millones en 2018 a una deuda neta de 54 millones, equivalente a 0,02 veces su ebitda.