Agro
La invasión de Ucrania agrava la crisis del campo español
Rafael Daniel
Valladolid,
Dice el refranero español que "a perro flaco todo son pulgas". En el caso del campo, parece cumplirse a pies juntillas. A los problemas endémicos de rentabilidad, los altos costes de producción y la sequía de esta campaña se le ha unido la invasión rusa de Ucrania.
El sector agroganadero está siendo uno de los más afectados por los excesos bélicos de Vladimir Putin, La invasión rusa no solo ha provocado ya registros históricos de los precios de los cereales, la energía y los fertilizantes sino que está haciendo emerger el fantasma del desabastecimiento de materias primas para la alimentación animal. En España hay casi un millón (969.193) de explotaciones ganaderas.
Nuestro país es deficitario en productos como trigo, maíz o girasol, base de la alimentación animal y tiene en Ucrania, considerado el granero de Europa, uno de sus principales mercados de abastecimiento. En la campaña 2020/2021 fue el segundo proveedor de maíz de España, por detrás de Brasil.
La invasión rusa ha tenido un rápido reflejo en los mercados de cereales, en los que en los últimos meses ya se habían producido un galopante encarecimiento por el desequilibrio entre la oferta y demanda mundiales. Pero en la última semana, las cosas se han agravado y se han registrado precios nunca vistos en algunos casos.
El pasado viernes, los futuros del trigo en la Bolsa de Chicago escalaban más del 6% hasta alcanzar su límite de negociación diario. A lo largo de la semana el trigo se había encarecido más de un 75% y el maíz escaló a su nivel más alto en casi una década.
Los problemas, sin embargo, no quedan ahí porque el fantasma de un desabastecimiento de materias primas básicas para los ganaderos de nuestro país está tomando forma ante el temor de que el conflicto se prolongue.
El coste de la alimentación podría obligar al sacrificio de animales en pocas semanas
El coste de la alimentación podría obligar al sacrificio de animales en pocas semanas
Tanto el sector del comercio de cereales como el de los fabricantes de piensos han urgido al Gobierno a tomar medidas por la "insostenible" escalada de precios y para evitar problemas de abastecimiento de alimentación animal que podrían llevar a tener que planificar sacrificios en muy pocas semanas.
El secretario general de la patronal de comerciantes españoles de cereales y oleaginosas (Accoe), José Manuel Álvarez, ha pedido que se pongan en marcha medidas urgentes para dar una "señal política" pronto a los mercados, ante unos precios "desorbitados". Álvarez declaró a Efe que la escalada de precios de materias primas está amenazando la rentabilidad del sector agrario y que en algunas zonas del país ya hay ganaderos que tienen problemas de liquidez por el coste de los piensos. La patronal de cereales ha solicitado que se permita la entrada de transgénicos de Estados Unidos, potencia líder en el comercio de maíz, con el fin de garantizar el suministro en el mercado comunitario.
También el director de la Confederación Española de Fabricantes de Alimentos Compuestos para animales, Jorge de Saja, reclamaba al Gobierno que haga "lo que técnicamente puede hacer" y que España, unilateralmente, autorice de manera excepcional la importación de materias primas de Argentina, Estados Unidos y Canadá porque "si no, otros países lo van a hacer".
Reservas para 45 días
Aunque el ministro de Agricultura, Luis Planas, descartaba un problema de desabastecimiento "a corto plazo", reconocía que las existencias de maíz en el puerto de Tarragona, al que llegan básicamente las importaciones de este cereal procedentes de Ucrania, son de apenas 45 días. En este sentido, reconocía que la actividad comercial desde los puertos de este país del Este está totalmente paralizada, existiendo muchas dudas sobre las posibilidades de siembra y producción para la próxima campaña 2022-2023 en Ucrania.
De hecho, el Gobierno español ya ha empezado a mover ficha. Planas ha pedido a la Comisión Europea medidas urgentes para hacer frente a la crisis creada por la invasión rusa. La más importante es que se flexibilicen los requisitos fitosanitarios de la UE a la compra de cereales a terceros países, como maíz a Argentina o soja y maíz a Estados Unidos, siempre con la plena garantía de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria. Otra medida planteada por España es que la UE permita la próxima campaña una mayor superficie de siembra de maíz y girasol.
Ante la situación, el presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo, ha solicitado que se permita el cultivo de oleaginosas en más de 500.000 hectáreas que la PAC obliga a dejar de barbecho.