Cada autonomía cuenta con una normativa específica para estas residenciasLa crisis del coronavirus ha puesto en entredicho la gestión de las residencias de ancianos en España, el colectivo más afectado por esta pandemia, tras registrar un gran número de fallecimientos en algunos de los centros de las regiones más afectadas, como es el caso de la Comunidad de Madrid. En España, hay unas 5.417 residencias de ancianos, que tienen capacidad para 372.985 personas, según los datos recopilados por el CSIC correspondientes a 2019. De esta cantidad, el 73% de las plazas son privadas, aunque el porcentaje varía en función de la autonomía. Esto también ocurre con las inspecciones que se realizan en este tipo de centros, donde cada comunidad autónoma cuenta con una regulación específica al respecto. En este sentido, Madrid es una de las regiones más avanzadas y desarrolla desde el año 2009 un plan anual de inspecciones a las residencias de mayores. Bajo la batuta de la Consejería de Políticas Sociales y Familia, los inspectores tienen la obligación de vigilar al menos una vez al año cada una de las 425 residencias de mayores de la Comunidad. Así, los inspectores del Control de Calidad, Inspección, Registro y Autorizaciones (Cira) son los encargados de comprobar el estado de estos centros y del trato que reciben los ancianos. Las infracciones pueden conllevar multas de hasta 660.000 euros y el cierre del centro en cuestión.Madrid también es una de las más transparentes, ya hace unos meses hizo públicos los nombres y motivos por los que los centros fueron sancionados entre 2014 y 2018, y ninguno de ellos es de los que han registrado enfermos o fallecidos por coronavirus hasta la fecha. En total, 130 centros sociales fueron multados: 96 fueron residencias de ancianos, seis centros de día y el resto eran residencias ilegales clandestinas.También es reseñable en cuanto a número de ancianos afectados el País Vasco, donde la residencia Sanitas San Martín (Vitoria) ha registrado diez fallecimientos en apenas 13 días y la previsión es que la cifra aumente, ya que cuenta con otros 45 pacientes más infectados. En esta región, en verano entró en vigor un nuevo decreto de centros residenciales para personas mayores, que "garantiza un mayor bienestar y una correcta atención de las personas mayores y regula los requisitos materiales, funcionales y de personal, que deben reunir todos los centros públicos y privados", explicó la consejera de Empleo y Políticas Sociales de la región, Beatriz Artolazabal, en la presentación. En el caso de esta región, su regulación establece la obligación de realizar una inspección a este tipo de centros una vez al año, pero esta frecuencia se podrá ampliar cuando lo considere oportuno o si hay una denuncia que así lo aconseje.Por su parte, Cataluña es la segunda región de España con más personas afectadas por el coronavirus, que ya se ha llevado la vida de varios ancianos en residencias de esta comunidad, que es la que más plazas tiene en sus más de 1.000 residencias de ancianos. En esta región, todos los centros reciben también inspecciones con cierta regularidad. Sin embargo, según los últimos datos disponibles, en solo un año la Generalitat detectó graves irregularidades en casi el 10% de las residencias de ancianos en Barcelona (en 2018 hubo 317 inspecciones a los 260 geriátricos de la ciudad), vinculadas sobre todo a higiene, medicación y alimentación.PensionesLos 1,8 millones de clientes de CaixaBank con su pensión domiciliada en la entidad -líder del segmento sénior en España con una cuota de mercado del 30%- la recibieron por adelantado ayer, aunque para acudir a cobrarla en efectivo deberán tener cita previa, para evitar colas entre este colectivo vulnerable.