Editoriales

La peligrosa vía de las concesiones de Rajoy


    elEconomista.es

    La aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2017 es fundamental para el Ejecutivo de Mariano Rajoy. Será la forma de convencer a Bruselas de que su paciencia con el año de Gobierno en funciones es correspondida con el compromiso español para cumplir los objetivos de déficit. Por si lo anterior no fuera motivo suficiente, no aprobar las cuentas oficiales implicaría directamente el fin de la Legislatura recién comenzada.

    De ahí que el Ejecutivo popular sea consciente de que necesita ganarse apoyos de otras formaciones políticas, si pretende superar su primera prueba de fuego. Hasta el momento, las concesiones que Rajoy ha hecho con vistas a ganarse los respaldos necesarios suponen un coste de 10.450 millones de euros.

    La cantidad resultante es producto de los 5.000 millones que supone elevar el tope de déficit de las comunidades autónomas hasta el 0,6%, que era condición sine qua non para lograr el sí de los socialistas. Otros 3.850 millones salen de satisfacer a Ciudadanos con un paquete de medidas sociales, indispensable para el apoyo del partido naranja al techo de gasto. Por último, el PNV está cerca de lograr 1.600 millones por la liquidación del cupo vasco.

    Ante una legislatura sin mayorías absolutas es necesario que el Ejecutivo dialogue y conceda a sus rivales políticos algunas de las exigencias, en aras de obtener un bien mayor, como es la aprobación de los Presupuestos. Pero eso no debe ser óbice para extremar la cautela ante la peligrosa vía de las concesiones que el Gobierno ha emprendido. Ahondar en exceso en ellas, al mismo tiempo que se confía en el crecimiento económico para cuadrar los números, pone en peligro la consolidación fiscal.