La volatilidad fue la reina del mercado ayer gracias a un solo hombre: Mario Draghi. Los índices protagonizaron un giro bajista que no pinta nada bien y ello nos llevó a reducir exposición ante el temor de que el rebote haya llegado a su fin.
Ya hemos salido de dudas. Ayer se celebró la reunión del BCE y no dejó a nadie indiferente, mucho menos al mercado. Anunció varias cosas. La primera y sorprendente fue la de reducir los tipos de interés al 0%, la segunda la de ampliar hasta 80.000 millones mensuales el programa de compra de bonos, la tercera la de reducir al -0,4 por ciento la facilidad de depósito y la cuarta la de incluir a los bonos corporativos en su programa de compras. Mucha munición que acabó indigestando a los mercados. Primero estos se atiborraron de alegría con la nueva inyección de liquidez en sistema lo que explica que en los cinco minutos posteriores al comunicado del BCE el Ibex 35 se disparar un 3% o el euro cayera un 1%. Pero luego, cada vez fueron más los analistas que incidan en dos lecturas no tan positivas de las medidas. Por ejemplo, se hacía hincapié en que la situación económica de la zona euro debía ser muy mala para haber adaptado tales medidas y segundo, que con ellas el BCE empezaba a quedarse sin munición, algo que Mario Draghi luego negó en la rueda de prensa.
Sin embargo, sembradas las dudas era cuestión de tiempo que los índices reaccionaran en consecuencia. Y lo hicieron hasta el punto que las ganancias de entre el 3 y 4% con las que recibieron a Draghi se convirtieron en pérdidas al final de la sesión en muchos índices europeos.
Desde el punto de vista técnico esto supuso que no pocos mercados desplegaran unas velas de giro bajista y desde Ecotrader se consideró ese brusco giro como el principio del fin del rebote y de ahí que se optara por recortar en 11 puntos la exposición a bolsa de la cartera recomendada hasta los niveles actuales del 41,5%. Así, se han reducido a la mitad las posiciones que se tenían en el sector bancario europeo y en el Eurostoxxx, se han cerrado las operativas sobre el Aex y sobre Legrand .
Sin embargo, a juzgar por el cierre que vimos en Wall Street, que aguantó por encima de soportes, aún no está todo el rebote perdido. Existe una pequeña opción de que los índices aún no hayan escrito el punto y aparte en este rebote y para saberlo es muy importante el cierre semanal que veamos hoy. "Las implicaciones potencialmente bajistas de estas velas se verían confirmadas si hoy viernes los índices cierran por debajo de los mínimos que marcaron ayer, tales como son los 2.968 puntos del Eurostoxx 50. Si al cierre los mantienen aún podríamos dar un margen de confianza a los alcistas y a las posibilidades de ver una continuidad de la consolidación de las últimas sesiones en vez de una corrección que al menos podría llevar al DAX 30 a los 9.300 y al Eurostoxx 50 a los 2.850 puntos", afirma Joan Cabrero, jefe de estrategia de Ecotrader. En el caso del Ibex 35, el cierre de ayer "plantea la posibilidad de que los máximos vistos en los 9.105 puntos hayan podido ser el techo del rebote de las últimas semanas. Nuevas evidencias técnicas que apuntarían hacia esa posibilidad las podríamos tener hoy si el Ibex 35 cierra la semana por debajo de los 8.730 y sobre todo los 8.660 puntos", afirma Cabrero.
En la agenda del día, conoceremos los datos de balanza comercial de Reino Unido así como los datos de inflación en Alemania y Francia.