La pérdida de soportes nos lleva a pensar que las bolsas pueden caer otro 3-6% antes de que llegue el rebote, que se iniciará en Wall Street, por lo que seguimos deshaciendo posociones hasta que el mercado americano, hoy cerrado por festivo, de la señal definitiva.
La semana pasada concluía con la esperanza de que el mini rebote que se vio desde soportes el jueves supusiera el fin de este complicado inicio de año para los mercados. Pero no. El cierre semanal dejó a los índices europeos perdiendo mínimos de 2015, como fue el caso del Eurostoxx, y a los americanos muy cerca de ello, lo que es de todo menos una señal de fortaleza. Y a juzgar por cómo está cotizando el mercado asiático, el nuevo espejo de los mercados occidentales, parece que estas caídas todavía no han dicho la última palabra. O al menos eso es lo que dice su aspecto técnico.