Los principales índices estadounidenses cayeron durante la jornada, incapaces de evitar los descensos que tuvieron lugar en Europa con anterioridad. La situación técnica de la bolsa estadounidense sigue siendo la misma.
De nuevo, las bolsas norteamericanas fueron incapaces de rebotar durante la jornada, y cayeron de forma destacable durante la jornada. En especial, la tecnología se comportó hoy especialmente mal, con caídas del 1,13% en el Nasdaq 100, que cerró la jornada en los 4.621,62 puntos. El Dow Jones perdió un 0,38% y cerró en los 17.850 puntos, mientras el S&P 500 cayó un 0,24%, hasta los 2.114 puntos.
Y es que, los resultados corporativos de Apple (AAPL.NQ) generaron descensos especialmente pronunciados en la tecnología, ya que muchas empresas del sector se contagiaron de las caídas del gigante tecnológico, y lastraron con fuerza a los selectivos del sector. Apple cerró la jornada con una caída del 4,29%, y terminó en los 125,14 dólares por acción.
Ni siquiera un buen dato de ventas de vivienda de segunda mano fue suficiente para convencer a los alcistas durante el día. Estas avanzaron durante el mes de junio un 3,2%, frente al mes anterior, cuando los expertos encuestados por Bloomberg con anterioridad habían previsto un avance del 0,9%.
A pesar de las caídas, la situación técnica de las bolsas estadounidenses sigue siendo la misma. Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader explica que "Esta corrección la vemos a priori como vulnerable y previa a mayores subidas aunque seguimos siendo muy prudentes a la hora de favorecer un escenario alcista con todas las de la ley dado que a corto plazo hemos vuelto a ver la tónica de los últimos meses, concretamente un mercado que le cuesta un imperio subir y cuando lo hace nos encontramos que los índices no suben al unísono". Habrá que esperar para ver hacia donde terminan yendo los principales selectivos bursátiles del gigante norteamericano.
La venta de viviendas de segunda mano durante el mes de junio ha superado las estimaciones en Estados Unidos. Los analistas esperaban que el dato aumentara un 0,9%, una cifra que se aleja del incremento final del 3,2%. Este crecimiento ha sido el más elevado del mes de junio de los últimos ocho años.
La mejora de este indicador, unido a la subida de los precios de las viviendas, ha vuelto a despertar la especulación sobre el aumento de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal. Los expertos consideran que este movimiento de la FED podría producirse entre septiembre y diciembre de este año.
Ante los signos de crecimiento de la economía estadounidense, los inversores han acudido a la compra del dólar. El billete verde ha conquistado su nivel más alto en casi cuatro meses y se ha impuesto a las demás divisas.
El euro se ha dejado un 0,31% frente a la moneda norteamericana y ha conseguido mantenerse en los 1,09 dólares, a pesar de que durante el día llegó a perder esta barrera. La divisa única ha mostrado un comportamiento mixto este miércoles, aunque la han superado la libra, el yen, el franco suizo y la corona danesa.
Los bajistas no dan tregua al oro, y los expertos consideran que esto va a seguir siendo así. El metal precioso ha cerrado hoy su décima jornada consecutiva de descensos, la racha más larga desde 1996, que lo ha hecho caer más de un 6 por ciento en este periodo. Ahora, cotiza en los 1.092 dólares por onza, pero algunas firmas de inversión, como Goldman Sachs, consideran que los descensos todavía tienen que profundizar.
En concreto, según ha publicado Bloomberg, la casa de análisis espera que el precio del metal continúe cayendo hasta perder los 1.000 dólares por onza, un precio que no se ve desde el año 2009. De hecho, al perder los 1.142,6 dólares la semana pasada, el metal marcó mínimos no vistos desde el año 2010.
La fiebre que experimentó este activo durante los primeros 12 años del siglo, que lo llevó a subir un 512% en este periodo, parece haber terminado. 2013 fue el principio del fin, cuando el metal cayó un 28%, el mayor descenso que experimentó desde 1981. En 2014 el deterioro fue del 1,5%, y este año ya acumula una caída del 7,7%.