El mercado estadounidense abrió al alza la sesión aunque los bajistas consiguieron ganar terreno durante el día, algo que no fue capaz de cambiar la Reserva Federal a cierre, con la excepción del Nasdaq 100, muy próximo de sus máximos.
La renta variable ha estado toda la semana pendiente de la reunión que iba mantener la Reserva Federal en la jornada del jueves. Pues bien, la fecha señalada en los calendarios bursátiles ha llegado y no se han producido importantes cambios a la hora del cierre. Y es que, la entidad no ha sido capaz de dar la vuelta hacia las ganancias a un mercado que tornó bajista a media sesión.
La Reserva Federal estadounidense ha decidido en la reunión de la sesión mantener los tipos de interés en un rango objetivo de entre el 0,25% y el 0,50%. El precio oficial del dinero se mantiene en dicho nivel desde que el pasado mes de diciembre optaran por incrementarlo por primera vez en casi una década. Pese a la negativa de la entidad que preside Janet Yellen por subir las tasas, el banco central de Estados Unidos aprecia menos riesgos para las expectativas económicas, lo que sugiere una mayor predisposición para subirlas en su encuentro de septiembre.
Aunque el mercado miraba a la Fed, en la jornada también ha sido protagonista Apple que presentó sus cuentas al cierre de ayer. . El fabricante del iPhone registró una caída en las ventas de su popular teléfono en su tercer trimestre fiscal, con el que suma ya su segundo descenso consecutivo de su producto estrella. Es por ello que su cifra de negocio se redujo hasta los 42.100 millones de dólares, un 15% menos. De dichas ventas logró convertir en beneficios un total de 7.800 millones, un 27% menos que en el mismo periodo de 2015, también lastrado por el empeoramiento del mercado chino. Pese a ello, las cuentas fueron mejor de lo estimado, lo que se tradujo en importantes ascensos en la bolsa.
Con todo ello, el Dow Jones ha cerrado en los 18.472,17 puntos al ceder un 0,01% mientras que el S&P 500 ha hecho lo propio un 0,12%, que le ha llevado a los 2.166,58 puntos. El Nasdaq 100, por su parte, ha salido mejor parado y, con un avance del 0,66%, se ha colocado en los 4.702,88 puntos.
Para Carlos Almarza, analista de JMKapital EAFI y Ecotrader, la Fed ha ayudado a que "los principales índices estadounidenses a pesar de la elevada sobrecompra a corto plazo sigan avanzando". El experto destaca las alzas del selectivo tecnológico ya que le llevan a atacar "los máximos vistos el pasado año en el entorno de los 4.700 puntos y muy próximo ya a los máximos históricos vistos en el año 2000 en el entorno de los 4.800 puntos".
El euro recupera los 1,10 dólares
La moneda del Viejo Continente se ha valido de la no subida de tipos en EEUU conocida tras el encuentro de la Reserva Federal para recuperar los 1,10 dólares al apreciarse en su cruce con el billete verde alrededor de un 0,15%.
Y es que, el euro ha sido la divisa más alcista de la sesión con el permiso de la libra esterlina, que ha logrado cerrar en positivo frente a los 10 cruces más líquidos que monitoriza Bloomberg. La moneda británica logra así alejarse de los mínimos de 1985 a los que llegó a ceder cuando su país optó por abandonar la Unión Europea en el referéndum celebrado el pasado 23 de junio.
En el polo opuesto se ha colocado el yen japonés, que se ha situado como la divisa más bajista a la espera del encuentro que mantendrá el Banco de Japón en lo que resta de semana. Según señala Bloomberg, pese al escaso margen de maniobra que le queda, cuatro de cada cinco expertos considera que la entidad que preside Haruhiko Kuroda incrementará en dicho encuentro las medidas expansivas, lo que ha movido a la baja a la moneda nipona.
El crudo profundiza en sus mínimos de abril
Por otro lado, el petróleo ha vuelto a anotarse una jornada de importantes pérdidas que han llevado al Brent a niveles que no visitaba desde el mes de abril con el West Texas profundizando en los mismos.
En concreto, el crudo europeo se ha dejado en la jornada más de un 2,2%, hasta los 43,4 dólares mientras que su homólogo estadounidense ha hecho lo propio un 2,4%, hasta cotizar por debajo de los 41,9 dólares. Lo que ha motivado dichas pérdidas es que los inventarios de crudo en Estados Unidos han puesto fin a su racha de caídas más prolongada de la historia al incrementarse la semana pasada en 1,67 millones de barriles, según la Agencia de Información Energética. El impacto ha sido mayor ya que el mercado había pronosticado una disminución de 2 millones de barriles.