Han sido necesarias seis jornadas de consolidación para que el Eurostoxx 50 haya alcanzado la zona de soporte y de giro potencial que esperábamos para valorar la conveniencia de aumentar la exposición a bolsa. Hablamos concretamente de niveles de 3.350 puntos, cuyo alcance encaja a la perfección con el escenario de reestructuración alcista que buscamos mediante una formación clásica de vuelta que en análisis técnico se conoce como cabeza y hombros invertido (HCHi?).
La cuestión ahora es ver si en este soporte de los 3.350 puntos aparece presión suficiente compradora y evidencias técnicas que apunten hacia un agotamiento vendedor e inviten a tomar posiciones en bolsa europea. Por el momento preferimos esperar a que el DAX 30 (DAX.XE) consiga superar resistencias de 12.400-12.460 puntos antes de aventurarnos a comprar ya que existe el riesgo de que las caídas puedan buscar la zona de mínimos del año si finalmente no hay una reacción contundente desde el entorno actual de soporte, algo que sería muy probable si el Nasdaq 100 perdiera soportes clave de 7.400 puntos.