Hoy no ha quedado ninguna duda de que han sido perdidos los soportes clave que hasta ahora les sugería vigilar en las bolsas europeas, tales como los 4.000 puntos del EuroStoxx 50 (SX5E.ST) y los 14.800 del DAX (DAX.XE)40. La fuerte presión vendedora ha partido el último reducto alcista que quedaba en las bolsas europeas, tras caer finalmente los soportes en las plazas de París y Milán. Esto obliga a seguir la hoja de ruta de disminuir la exposición a bolsa hasta el entorno del 50%, que es un nivel en el que podrán sentirse más cómodos en un contexto en el que la amenaza ahora es ver como el EuroStoxx 50 acabe yendo a buscar apoyo a la zona de soporte crítica de los 3.600 puntos, cuya pérdida podría abrir la Caja de Pandora de ver caídas hasta los 3.000 puntos, esto es de un 15% adicional hasta niveles donde cotizaba la principal referencia europea antes de que aparecieran las primeras vacunas contra el Covid 19.
Llegados a este punto y con una exposición en torno al 50%, la recomendación es que no vendan en pánico ya que el alcance del soporte de los 3.600 puntos sería, en circunstancias normales, lo que se podría llamar como la oportunidad del año para comprar bolsa, buscando que desde ahí la tendencia alcista principal se retome para marcar nuevos máximos crecientes sobre los 4.400 puntos.
En el caso del Ibex 35, la fuerte presión vendedora ha llevado al selectivo español a buscar la zona de soporte de los 8.000/8.080 puntos, que es la base del canal que viene acotando la consolidación desde el mes de junio del año pasado, fecha en la que el selectivo español llegó a alcanzar los 9.310 puntos. Ese entorno de soporte de los 8.000 enteros coincide además con lo que sería un ajuste del 38,20% de Fibonacci de toda la tendencia alcista que inició el Ibex 35 en los mínimos de marzo de 2020, que como bien saben es un soporte teórico muy importante desde el punto de vista técnico. Es por ello que no me sorprende que el alcance de este entorno haya frenado la caída, sin perjuicio de que no se puede descartar que en otro vendaval bajista podamos ver al selectivo español poner a prueba la zona de mínimos del año pasado en torno a los 7.700 puntos, que es donde está el soporte que separa una consolidación previa a mayores alzas de un escenario potencialmente bajista que podría. Mientras el Ibex 35 resista sobre los 7.700 puntos no soy partidario de vender renta variable española.
Para que se alejen los riesgos bajistas y podamos confiar de la sostenibilidad de un eventual rebote en la bolsa española lo que hay que exigir es que el Ibex 35 cierre el hueco bajista del conflicto de Ucrania, para lo cual debería cerrar una sesión sobre los máximos del miércoles 23 de febrero en los 8.607 puntos.