Situación de corto plazo:
Que dos pesos pesados en el Ibex 35 (IBEX.MC) como son el Santander y el BBVA ayer perdieran soportes clave de corto plazo, que advierten de una probable vuelta a la zona de mínimos de marzo, es de todo menos algo alcista para el selectivo español, como tampoco lo fue la pérdida de la base del canal que venía guiando a la perfección el rebote que nació en los mínimos de marzo en los 5.814 puntos.
Todo esto son elementos que hacen que gane enteros un contexto potencialmente bajista que podría llevar al Ibex 35 a buscar apoyo en los mínimos de abril y mayo en los 6.420 puntos. Hasta ahí todavía hay un recorrido bajista del 10%, lo cual encajaría con una vuelta del Eurostoxx 50 a los mínimos de junio en los 3.055-3.100 puntos.
Esta amenaza bajista aumentaría considerablemente si los recortes prosiguen a corto y el Ibex 35 pierde soportes de 7.060 puntos, que es la base del lateral que acota la consolidación durante las últimas semanas. Para que se aleje este riesgo, cuando menos temporalmente, lo mínimo exigible es que un eventual rebote consiga cerrar el hueco que se abrió el pasado viernes a partir de los 7.385 puntos. Si recupera este nivel estaríamos delante de un contexto más lateral en el que se seguirá consumiendo tiempo entre la resistencia de los 7.663 y el soporte de los 7.060 puntos.
Situación tendencial:
El alcance de la zona de mínimos de 2012 en torno a los 5.800-5.900 puntos ha logrado frenar hasta el momento la tendencia bajista que define el Ibex 35 a lo largo de los últimos años. Mientras no se pierda este soporte no tomará cuerpo la hipótesis que manejamos de cara a los próximos meses, que valora la posibilidad de que aún veamos una caída del Ibex con dividendos hacia la base de su canal alcista de largo plazo y en el peor de los casos hacia los mínimos que marcó el año 2009 y 2012. Si esto sucede hay que tener presente que niveles de soporte análogo en el Ibex 35 tradicional serían los 4.000 puntos, que es el límite máximo de caída que a priori establecemos en la actual tendencia bajista. Entre los 5.300 y en el peor de los casos los 4.000 puntos es donde muy probablemente se forme un suelo de largo plazo y compras realizadas en este entorno obtendrán una rentabilidad impresionante en próximos años.