Situación de corto plazo:
El Ibex 35 (IBEX.MC) lleva cinco jornadas consolidando posiciones por debajo de la zona de resistencia de los 9.800 puntos, algo que no hace más que reforzar este entorno como la línea divisoria que separa un simple rebote por sobreventa de una reacción al alza en la que ganaría enteros la posibilidad de ver movimiento alcista sostenible en el tiempo. Este escenario alcista cobraría mucha fuerza si al otro lado del Atlántico el DowJones Industrial (DJI.NY) consigue batir resistencias clave que presenta en los 24.682 puntos y es el que consideramos como más probable mientras no se pierdan en Wall Street los soportes "urbi et orbe", esto es, los mínimos que marcaron los índices norteamericanos el pasado 9 de febrero.
La superación de la zona de los 9.800-9.850 puntos sería un argumento más a favor de que los mínimos establecidos en los 9.327 puntos hayan sido el suelo de la corrección bajista de los últimos meses. Mientras eso no suceda se mantendrá el riesgo bajista, si bien es cierto que a corto no habrá un deterioro alcista mientras no se pierdan soportes de muy corto plazo en los 9.700 puntos y sobre todo que no se cierre el hueco que se abrió desde los 9.500 puntos. Una consolidación hacia los 9.500-9.600 puntos la veríamos a priori como una oportunidad para comprar bolsa española.
Situación tendencial:
La tendencia bajista que definía el Ibex 35 desde abril de 2015, fecha en la que se aproximó a los 12.000 puntos, ha encontrado suelo en la zona de los 7.600 puntos. Los objetivos que buscábamos en los 11.000-11.200 puntos ya han sido alcanzados y, por encima, el siguiente objetivo se localiza en el origen de la última tendencia bajista, esto es, la zona de los 11.885 puntos. Para que se ponga en jaque este escenario alcista es necesario que se pierdan soportes que presenta el Ibex 35 en los 9.375 puntos, cuya cesión abriría la puerta a caídas hacia la zona de los 8.900-9.000 puntos.