Situación de corto plazo:
El Nasdaq 100 (NDX100.NQ) y el S&P500 (SP500.CH) lograron la semana pasada marcar nuevos altos de todos los tiempos y esto es de todo menos algo bajista y refuerza el soporte que venimos insistiendo vigilar de los 4.150/167 puntos del S&P 500 como la línea divisoria que separa un contexto alcista de uno potencialmente correctivo bajista, dependiendo de si se mantiene o se pierde respectivamente.
Teniendo claro que mientras el S&P 500 no pierda ese rango de soporte no hay que plantearse vender renta variable norteamericana y hay que seguir confiando en mayores ascensos, ahora las miradas las volvemos a tener puestas en el comportamiento del Dow Jones Industrial, que la semana pasada logró revolverse al alza desde la base de un canal que tiene visos de haber sido una clásica bandera de continuidad alcista. Esto es positivo pero para reforzar el contexto alcista y para que se alejen las amenazas bajistas sería importante que el Dow Jones Industrial también consiga marcar nuevos altos de todos los tiempos y para ello debe romper los recientes máximos que marcó en los 35.091 puntos. Si eso sucede tendríamos un trío de ases en Wall Street y con esa mano es difícil que los alcistas pierdan el control.
Situación tendencial:
El Dow Jones Industrial ha conseguido finalmente superar la zona de máximos pre-Covid19 que marcó en febrero en torno a los 29.570 puntos, cuya ruptura es algo que habilita la cancelación de una divergencia potencialmente bajista que se había abierto desde hace semanas ante la incapacidad del Dow Jones Industrial de seguir la estela alcista del Nasdaq y el S&P 500. Con el Dow Jones Industrial superando los máximos pre Covid ya tenemos el trío de ases en Wall Street, lo cual refuerza por si había alguna duda que el mercado norteamericano se encuentra en subida libre absoluta, que es la situación técnica más alcista que existe. No vemos por el momento nada que sugiera un cambio dentro de esta tendencia alcista.