Después de que ayer las bolsas europeas fracasaran en su intento de dejar atrás la fase de consolidación que desarrollan durante las últimas sesiones, no nos sorprende que prosiga esta consolidación y las ventas se impongan a corto plazo. Lo más destacable de esta jornada, que cierra la segunda semana de corte consolidativo en Europa, es ver como el Ibex 35 (IBEX.MC) está perdiendo los mínimos que marcó durante la primera semana del año en los 8.000-8-037 puntos, lo cual es de todo menos un signo de fortaleza que nos advierte de la posibilidad de que estemos ante un proceso más correctivo que consolidativo, que podría no encontrar freno hasta la zona de mínimos de diciembre pasado en los 7.660 puntos, cuyo alcance sería una oportunidad para realizar nuevas compras orientadas a medio plazo. Esta amenaza ganaría enteros si el resto de bolsas europeas también pierden soportes análogos, como son los 3524 puntos del Eurostoxx 50 (SX5E.ST).