Divisas

La nueva flotación sucia del franco o cómo Suiza interviene 'a la chita callando' en el mercado de divisas

  • El presidente del BNS asegura que su balance "no tiene límites"
  • El BNS no ha reconocido que ha establecido un nuevo tope al franco

Vicente Nieves, Bloomberg

En enero de 2015, el Banco Nacional de Suiza anunció que abandonaba el límite que impedía al franco caer por debajo de los 1,20 francos por euro. Tras esta decisión, franco se apreció hasta rebasar la paridad, con 0,98 francos se podía comprar un euro. No obstante, esa situación duró muy poco. A día de hoy, la divisa suiza se mueve entre los 1,08 y 1,11 francos, una horquilla que ningún miembro del Banco Nacional de Suiza (BNS) ha hecho pública, pero que parece una sólida barrera construida por la intervención del BNS

Según informan desde Bloomberg, varios analistas de UBS y Bank of Amercia han explicado que hay un nuevo tope para el franco suizo, que deja a la divisa un 10% más fuerte o apreciada respecto al anterior límite. 

Tras abandonar la política de los 1,20 francos por euro, las fuerzas del mercado actuaron y la divisa helvética se aprecio de forma violenta, poniendo en peligro la economía al sector exportador de Suiza, que ayuda a mantener los grandes superávits por cuenta corriente de este pequeño país. 

De modo, que de una forma velada, el BNS volvió a intervenir en el mercado de divisas para establecer un tipo de cambio más favorable para Suiza, aunque sin establecer ningún tipo de tope o límite. De este modo, el organismo monetaria intenta restar presión al tipo de cambio de la divisa helvética.

¿Tiene límites el balance del BNS?

Para evitar que el franco se aprecie demasiado, el BNS se ve obligado a vender en el mercado de divisas grandes cantidades de francos, mientras que compra otras divisas extranjeras. Estas operaciones han llevado a este banco central a acumular la friolera de 630.000 millones de dólares en reservas de divisas. 

David Kohl, investigador en Julius Baer, señala que "existe una presión política para que el BNS use su fuerza para estabilizar el tipo de cambio. Con esta intervención, el BNS incrementa sus activos en euros, si el franco suizo se aprecia, estos activos perderán valor". 

Kamal Sharma, director de estrategia con divisas de Bank of America para Europa, sostiene que "no hay ninguna declaración del BNS que reconozca el nuevo tope del franco... Pero si miramos al tipo de cambio, los gráficos, vemos que el franco no ha ido más allá de las 1,08 unidades por euro". 

A pesar del elevado tamaño del balance del BNS, su presidente, Thomas Jordan, aprovecha cada intervención para asegurar que aún hay espacio en el balance de esta entidad para seguir comprando activos: "El balance es grande, pero todavía tenemos espacio para intervenir. Estamos analizando los costes y los beneficios de la intervención. No hay límite en el balance", explica Jordan en septiembre.