Los tres frentes de batalla de la Juventus para hacer de Cristiano Ronaldo un fichaje rentable

Desde que, un 10 de julio de 2018 marcado en la historia del fútbol, Cristiano Ronaldo fichase por la Juventus de Turín, muchos han sido los análisis que han tratado de desentrañar las posibilidades que se le abrían al equipo italiano, obligado a conseguir rentabilidad en una operación que, por su naturaleza, implica numerosos costes. La batalla de la 'Vecchia Signora' se va a librar en tres frentes. De su rendimiento en estas parcelas dependerá el éxito o fracaso (económico) del fichaje del verano.

Las claves las aporta el detallado informe 'Football Benchmark' de la auditora KPMG. En este estudio, la perspectiva para la Juventus es halagüeña, pero realista. Aunque los 117 millones de euros pagados por CR7 suponen un 28% de los ingresos de la entidad turinesa (superado solo por Neymar y su contratación por parte del PSG, con un 42%), ésta tiene opciones de convertir el fichaje de Cristiano en un triunfo más allá del césped, pero para que eso suceda debe estar sujeta a trabajo y clarividencia empresarial.

En primer lugar, y a modo de perogrullo, los éxitos deportivos influyen. Lo que parece una consecuencia lógica se desgrana de la siguiente manera: con Cristiano en sus filas, la Juventus puede aumentar sus ingresos en taquillaje y porción del pastel televisivo europeo e italiano. Aunque en lo relativo a entradas y abonos influirá la subida de precios (en torno al 30%) previa al fichaje del luso, su paso por la Champions marcará los beneficios obtenidos en ese terreno, comparados con los de la temporada 17/18. Si es capaz de alcanzar los cuartos de final de la pasada edición, llegará a los 10 millones de euros de beneficio, que podrían subir a 15 en caso de levantar la 'Orejona'.

En lo relativo a ingresos televisivos, su devenir deportivo en la máxima competición europea también será determinante: igualando su rendimiento del curso anterior (victoria en la Serie A y 1/4 en Champions), ganaría entre 10 y 20 millones de euros de más. La cantidad ascendería de manera progresiva, hasta los más de 50 de resultar ganadores los turineses en la final que se disputará en Madrid en 2019.

La segunda batalla se refiere al campo comercial. En este aspecto, la premisa es clara: si la Juventus toca las teclas adecuadas, podrá reducir y mucho la distancia que le aleja del resto de grandes clubes europeos (Manchester United, Barcelona, Real Madrid o Bayern de Múnich), que duplican con holgura sus ingresos en la materia.

Para pasar de los 120 millones de euros por curso actuales a unos 195-220 en tres años, el equipo italiano puede actuar de diferentes maneras. Una de ellas es la búsqueda de nuevos patrocinios. La llegada de Cristiano debería ser, por sí sola, un acicate potente para nuevas marcas. El hándicap de la 'Juve' es su camiseta, que le genera 40 millones de euros anuales, una cantidad que le merma competitividad respecto a competidores como Manchester United (156) o Real Madrid y Barcelona (140). La reformulación de su vínculo con Jeep (propiedad de Fiat, de la familia Agnelli, dueña mayoritaria del club) sería una posibilidad, aunque es un palo ciertamente conflictivo: los trabajadores de la empresa automovilística ya le declararon la guerra a sus patronos por el alto coste del fichaje del portugués.

Por encima de todo, y ahí está la verdadera lucha, quedarían los territorios en los que la Juventus no ha conseguido cuota de mercado y en los que, de la mano de Cristiano, podría entrar de cabeza. Es el caso de Asia, Norteamérica o África, alternativas a tener en cuenta para reducir la importancia del mercado nacional (significa más de un 40% a diferencia de sus rivales, que lo sitúan en un rango del 15 al 25%) y conseguir ingresos publicitarios extra.

Pero no solo eso: los seguidores que Cristiano tiene por todo el mundo se convertirán en seguidores de la Juventus por mero arrastre...y su llegada podría significar una subida de las ventas de merchandising, en las que se enmarcan las camisetas. Más allá de rumores que se alejan de la verdad (ni el club alcanzó medio millón de ventas en el primer día ni consiguió 54 millones de euros de ingresos), la entidad piamontesa va a ver aumentada y diversificada su masa social, una circunstancia de la que deberá sacar tajada: Cristiano, con 322 millones, multiplica por seis los seguidores en redes sociales de la Juventus. Brasil, India y EEUU aparecen como regiones en las que encontrar una fuente destacable de ventas.

Si Neymar, en 2017, ya hizo crecer un 30% los usuarios de las redes sociales del PSG, Cristiano también ha supuesto un antes y un después: del 5 al 17 de julio, tanto los rumores de su fichaje como la oficialización de su llegada conllevaron un 15 y 25% más de seguidores en Twitter e Instagram, respectivamente.

Por último, y no menos importante, equilibrar la parcela de los costes de personal. El sueldo bruto de Cristiano, unos 55-56 millones de euros, representa el 21% de la partida de personal de los presupuestos de la Juventus. Junto con los gastos de amortización, el impacto de su fichaje en términos financieros es de unos 85 millones de euros por año.

Una operación de este calado tensiona los mecanismos del club para respetar el Fair Play de la UEFA (que obliga a tener 30 millones de euros de pérdidas en los últimos tres años y no superar los 100 'kilos' de pérdidas en un solo ejercicio) y abocará a la 'Vecchia Signora' a una venta que encauce la consecución de un equilibrio al que ayudan los 42 millones de euros de beneficio registrados en el pasado curso. En la rampa de salida, un nombre: el de Gonzalo Higuaín. El delantero argentino, sin sitio por la llegada de Cristiano, podría suponer una inyección de entre 60 y 70 millones de euros.

Un empujón necesario y aparentemente suficiente para atemperar el golpe de una inversión tan grande como la realizada este verano y, probablemente, el primer paso para sacar réditos de un fichaje mayúsculo en todas sus vertientes. Una operación cuya rentabilidad ya está en manos de la Juventus: si el club turinés logra aprovechar las oportunidades que el fichaje de Cristiano le pondrá en el camino, saldrá fortalecido del movimiento y elevado a una nueva posición en el universo fútbol. La pelota está en su tejado.