Los conservadores se pasan al bitcoin: los fondos de pensiones no quieren perderse el rally del 128%
- Los fondos de pensiones se han colocado entre los grandes tenedores de los ETF
- BlackRock, Ark o Grayscale dan una rentabilidad del 128% en un año
- La mayor adopción de las criptomonedas y el rally del bitcoin han ido de la mano
elEconomista.es
Los fondos cotizados de bitcoin mueven miles de millones de dólares. El regulador estadounidense aprobó la negociación de estos ETF hace justo un año, periodo en el que su rentabilidad ha alcanzado los tres dígitos. Es uno de los motivos que ha contribuido a la popularización de estos vehículos y hasta los inversores más conservadores del mercado han acabado rindiéndose a los fondos de bitcoin.
Los fondos de pensiones de Wisonsin (The Wisconsin Retirement System) o Michigan (Michigan Office of Retirement Services) están entre los mayores tenedores de estos fondos cripto. El primero de ellos llegó a tener la duodécima mayor posición en el ETF iShares Bitcoin Trust de BlackRock a finales de septiembre, que valdría ahora 155 millones de dólares tras una revalorización del 50%, según Financial Times. En el caso del de Michigan, tiene posiciones en el ETF de ARK 21Shares Bitcoin y en el de Grayscale y también ha llegado a tener un peso importante.
Estos tres fondos cotizados acumulan una rentabilidad del 128% en el último año. Hay más de una decena de ETFs de bitcoin y los activos que los componen pueden variar. En el caso los vehículos de Ark, Grayscale y BlackRock, los tres limitan sus inversiones a la criptomoneda y, por ello, dan la misma rentabilidad.
Habida cuenta del rally del bitcoin desde el lanzamiento de los ETF, los fondos de pensiones no han querido perderse estos retornos tan atractivos. Aunque estos fondos suelen ser conservadores y normalmente están concebidos para tener un riesgo bajo, la criptomoneda ya ha llegado a los mismos. No solo en los ejemplos mencionados de Estados Unidos, sino en otros casos como en el fondo canadiense Ontario Teachers' Pension Plan o en el caso de la australiana AMP, que gestiona fondos de pensiones, detalla el mismo medio.
Tal es la magnitud de estos fondos de bitcoin que el de BlackRock ya tiene una capitalización de 55.210 millones dólares, el de Grayscale ha alcanzado un valor de 20.300 millones y el de Ark, de 4.700 millones de dólares.
Las criptomonedas se han ido extendiendo más allá de la inversión minorista. Precisamente, la aprobación de los ETF al contado en Estados Unidos fue un gran hito para la institucionalización del bitcoin y otros tokens. Desde entonces, el mercado de las criptomonedas ha tenido la suerte de cara; la adopción y el rally han ido de la mano. El visto bueno a los fondos cotizados por parte del regulador americano impulsó la compras y, en las últimas semanas, la elección de Donald Trump como presidente en EEUU ha dado lugar a una nueva racha alcista.
Además de que los inversores más conservadores están entrando, el bitcoin llega cada vez más lejos. Algunas empresas han empezado a proponer a la Junta de Accionistas comprar criptos para su propia tesorería.