Capital Riesgo

El Santander y Pemberton se alían para financiar a grandes clientes del banco

  • Lanzan una 'joint venture' enfocada en la cadena de suministro y el stock de empresas
     
  • Registran la marca comercial Invensa y domicilian la sociedad conjunta en Reino Unido

Cristian Reche

Banco Santander da un nuevo impulso a su negocio de grandes clientes a través de la financiación de circulante para asegurar la cadena de suministro y las reservas de stock. La entidad española ha sellado una alianza con Pemberton Asset Management, plataforma especializada en estrategias de crédito privado, para lanzar una joint venture dedicada al área de Suply Chain Finance (SCF), que ahora mismo asegura a más de 400.000 proveedores de multinacionales.

Las compañías han bautizado su proyecto como Emerald y han registrado la marca comercial Invensa para esta empresa de nueva creación, si bien se desconoce si esta enseña será la utilizada cuando el proyecto esté en marcha. De entrada, Banco Santander y Pemberton han creado la estructura societaria de su joint venture, que estará participada por ambas entidades. Se localizará en Reino Unido mediante una sociedad limitada que de momento está fondeada únicamente por la firma extranjera. Santander y Pemberton declinaron realizar comentarios a elEconomista.es.

El proyecto tendrá un alcance global, habida cuenta de que se dirige a los grandes clientes del banco con presencia en multitud de países. El área operativa inicial la compondrán Estados Unidos, varios países de Europa, Latinoamérica y Asia. Dado el tamaño del proyecto y el ámbito económico en el que operará, Banco Santander y Pemberton están a la espera de las autorizaciones regulatorias pertinentes. La petición se ha elevado a la Comisión Europea, que aparentemente dará el visto bueno al expediente recibido en las próximas semanas.

El Santander hasta ahora sitúa el área de Suply Chain Finance desde su banca corporativa y de inversión (CIB, por sus siglas en inglés) con Mencía Bobo, responsable global de Trade & Working Capital, como rostro visible. Sus principales enfoques incluyen soluciones de confirming (anticipación de facturas por cobrar) que permite a sus clientes gestionar de manera eficiente los pagos a proveedores con condiciones de pago flexibles. Pemberton, por su parte, también ha apostado por esta estrategia, hasta el punto de que en 2023 ya había recaudado 1.000 millones de dólares.

La apuesta de la gestora de crédito alternativo se apoyaba en varias tesis. La primera era una mayor demanda de financiación de capital circulante (17%), pasando de 4,6 billones en 2020 a los 5,4 en 2021, según datos de la consultora PwC.

Igualmente, se prevé que este mercado siga creciendo en 2025, pues los bancos siguen siendo los actores dominantes del mercado sigue siendo la banca tradicional, pero los proveedores de financiación alternativa tienen cada vez más peso.

Alianzas con fintechs y plataformas propias

La banca española ha desplegado distintas estrategias en la financiación de la cadena de suministro. BBVA creó hace años una nueva solución para competir y liderar este negocio en América Latina, Estados Unidos y Europa bajo el nombre de BBVA Global Supply Chain Finance. Bankinter, por ejemplo, ofrece desde Banca Internacional un nuevo servicio digital de Supply Chain Finance que servirá para movilizar el circulante de sus clientes importadores y exportadores a través el anticipo de facturas y garantizando los compromisos de pagos.