Capital Riesgo

Un grupo de tres fondos 'rebeldes' reclama su entrada en el consejo de Grifols

  • Flat Footed, Mason Capital y Sachem Head remiten una carta al consejo de administración
  • Afirman que los inversores minoritarios han sido testigos de una importante destrucción de valor
  • Grifols amplía la demanda contra Gotham City

Cristian Reche
Madrid,

Tensión en torno al consejo de administración de Grifols en medio de la antesala de la posible opa que Brookfield y la familia propietaria planean sobre la farmacéutica catalana. Un grupo de tres fondos internacionales de corte activista, compuesto por Flat Footed, Mason Capital Management y Sachem Head Capital Management, ha remitido una carta al consejo de administración para solicitar su entrada en el órgano de gobierno. Estos inversores institucionales, que representan el 7,7% del capital social de la compañía, han seleccionado a Paul Herendeen, un ejecutivo de la industria farmacéutica, para que actúe como representante de sus intereses.

El grupo de fondos explica en un comunicado que, pese a que la farmacéutica catalana opera en un atractivo sector de crecimiento, "los inversores minoritarios han sido testigos de una importante destrucción de valor para el accionista debido a las decisiones adoptadas por el consejo de administración de Grifols a lo largo del tiempo".

Esta razón ha empujado al grupo de inversores a ejercer su derecho a designar un consejero que ocupe uno de los puestos actualmente vacantes en el consejo de administración. Flat Footed, Mason Capital Management y Sachem Head Capital Management tienen como objetivo maximizar el valor y mejorar el gobierno corporativo de la compañía "en beneficio de todos los accionistas minoritarios", añaden en su escrito.

Los tres fondos hacen alusión directa a la posible opa de Brookfield y la familia propietaria para excluir a la compañía de bolsa. En su escrito señalan que "cualquier adquisición debería plantearse a un precio que sea justo para todos los accionistas y tenga en cuenta la actual desconexión de valoración del mercado". Sus palabras se justifican en "el potencial de mejora del flujo de caja libre y las perspectivas de desapalancamiento" que tiene por delante la farmacéutica catalana.

Paul Herendeen, su representante

La estrategia del grupo pasa en primer lugar por buscar un representante para el consejo. El seleccionado es Paul Herendeen, un ejecutivo conocido en la industria farmacéutica. Herendeen cuenta con experiencia como presidente, director financiero y miembro del consejo de administración de destacadas empresas farmacéuticas internacionales como Zoetis, Bausch Health, Endo y Elanco.

Los fondos, que se han apoyado en el despacho Baker & McKenzie como asesor legal, piden que la llegada de su representante al consejo se produzca "de forma inmediata" teniendo en cuenta las vacantes existentes en el órgano de gobierno y por razones de eficiencia. Solicitan además que su nombramiento quede sujeto a posterior ratificación en la próxima junta general de accionistas.

Este movimiento llega después de que Grifols iniciara la búsqueda de un asesor para que negocie con los accionistas con menor participación el resultado de la oferta pública que se cierne sobre la empresa, según adelantó 'Bloomberg'. En el mercado apuntan a que esta figura sería la de un 'proxy solicitor', un agente acostumbrado a trabajar como interlocutor entre las partes.

En paralelo, Brookfield sigue aterrizando su propuesta. El fondo canadiense ha mantenido conversaciones con el fondo soberano ADQ, de Emiratos Árabes Unidos, y con GIC, de Singapur, si bien no se ha llegado por el momento a ningún tipo de acuerdo. El gigante estaría buscando una financiación de unos 10.600 millones de dólares (9.500 millones de euros) para poder lanzar la adquisición para cubrir el segmento de deuda de la cotizada española.

Quiénes forman el grupo

Los inversores 'rebeldes' de Grifols son 'hedge funds' con vasta experiencia en este tipo de operaciones. Por ejemplo, Flat Footed, fondo habituado a situaciones especiales y centrarse en empresas apalancadas con una gran cantidad de activos y estructuras de capital complejas, lideró el pasado año un movimiento en contra de la fusión entre la estadounidense Diversified Healthcare Trust (DCH) y Office Properties Income Trust (OCI).

Por su parte, Mason Capital es una gestora fundada en 2000 por Kenneth Garschina y Michael Martino y que, de acuerdo a datos de cierre de 2023, cuenta con activos bajo gestión que ascienden a 1.400 millones de dólares. Sachem Head tiene sede en Nueva York y fue fundada en 2012 por Scott D. Ferguson, ejecutivo que, de acuerdo a la revista 'Fortune', trabajó en el pasado con el conocido inversor activista Bill Ackman.