Capital Riesgo
El fondo Sherpa compra los negocios de alarmas y seguridad del grupo INV
- La firma adquirida entró en concurso con una oferta del fondo español
- INV negoció sin éxito en 2021 la venta de parte de su negocio al grupo ADT
- Sherpa entra en el sector del transporte y toma una posición de control en Logística Carosan
Cristian Reche
Madrid,
Sherpa Capital pone en el foco el sector de la seguridad. El private equity español acostumbrado a irrumpir en compañías en situaciones especiales ha recibido autorización para comprar parte del negocio de seguridad de INV, antigua Seguriber, que entró en concurso de acreedores a finales del pasado año y lo hizo ya con una oferta del grupo inversor. La compañía, que ha recibido ya el visto bueno del Juzgado Mercantil Número 2 de Madrid, buscará ahora crear una plataforma de crecimiento en torno al sector de la seguridad en España
El perímetro de la oferta no es por todo el grupo, sino por varias partes. El precio de la transacción asciende a aproximadamente 20 millones de euros y se dirige a adquirir el negocio de INV Protección e INV Seguridad. La primera área está especializada en servicios de instalación y mantenimiento de alarmas para particulares y empresas y cuenta con una cartera de 25.000 conexiones entre clientes residenciales y corporativos. La segunda se centra en el diseño, ingeniería e instalación de sistemas de seguridad para proyectos de energía, centros de datos, sector terciario e infraestructuras críticas. Tiene entre sus clientes relevantes a Iberdrola, Eiffage o Mercury.
Con 150 millones de facturación y un ebitda en torno a los 15 millones hasta antes de la pandemia, el grupo INV ha sido una empresa representativa en el mundo de la seguridad. Su división de alarmas es la que más pesa del grupo (71 millones de euros, según la última información facilitada en su web). Menos peso tienen los servicios de vigilancia (49 millones), los auxiliares y complementarios (15) y los de seguridad pasiva (11,5 millones).
Con la llegada del coronavirus, la empresa se vio afectada y terminó firmando un crédito de 45 millones con un grupo sindicado de acreedores entre los que estaban CaixaBank y Banco Santander, acompañados por BBVA, Banc Sabadell y Deutsche Bank. La financiación se complementaba con otro tramo de otorgado por uno de los fondos de deuda privada de Alantra (15 millones de euros).
Sherpa ha articulado su oferta a través de Mantinsa Capital (ahora Ironlock Solutions), vehículo dependiente de su fondo Special Situations III dedicado inicialmente a empresas en apuros. De hecho, en su solicitud de compra ofrecía financiación interina para que los negocios de INV no vieran interrumpida su actividad pese a la entrada en concurso. El despacho Pérez Llorca ha asesorado legalmente desde el lado comprador en esta transacción.
Sherpa Capital destaca que basará el futuro crecimiento de las compañías adquiridas en en el impulso de sus negocios actuales y "en la diversificación hacia otros servicios de alto valor añadido dentro del ámbito de la seguridad". En este sentido, el objetivo del fondo, que ha sido comandado para esta operación por Javier Casado, es crear una plataforma referente en el sector, capaz de cubrir las necesidades de seguridad de infraestructuras críticas tanto de grandes corporaciones como para pymes y sector residencial.
Interés del gigante ADT
La operación llega tras dos años del intento de venta de las alarmas de INV al gigante ADT. En 2021, la compañía española negoció con la firma estadounidense, considerada la tercera compañía por tamaño de dicho sector, en el que se disputa el podio con Securitas Direct y Movistar Prosegur Alarmas.