China pasa del Brexit: prepara la construcción de un nuevo distrito financiero en Londres
- Aprovechan la caída de la libra y las escasas oportunidades en casa
Bloomberg , elEconomista.es
La salida de la Unión Europea de Reino Unido no ha asustado a los inversores chinos. Al menos, a cuatro de sus principales bancos, que han apoyado construir un nuevo distrito financiero en Londres para empresas asiáticas, el Royal Albert Dock, independientemente del resultado de las negociaciones del Brexit.
En concreto, estos cuatro bancos han acordado financiar la primera etapa de la transformación de un antiguo muelle en el East End londinense, valorada en 1.700 millones de libras y situada enfrente del aeropuerto de la Ciudad de Londres, el quinto de la ciudad.
El proyecto, desarrollado por la promotora china ABP y Citic, brazo inversor del Gobierno de la República Popular de China, ha obtenido ya 400 millones de libras para esta fase, y ha comenzado a admitir reservas para 13 de los 20 edificios que compondrán este complejo, que incluirá oficinas y viviendas. Los bancos que se han sumado son Bank of China, Agricultural Bank of China, Industrial & Commercial Bank of China (ICBC) y Chinca Construction Bank, todos bajo el paraguas estatal.
Con Brexit o sin Brexit, levantar un distrito financiero es complicado, como muestra la historia de Canary Wharf, situado precisamente a vista de pájaro de Royal Albert Dock. El proyecto quedó en manos de los acreedores en 1992 después de que el promotor, Olympic & York, hiciera default.
Posteriormente, Songbird, propietario de la mayoría del distrito, se vio forzado a vender acciones en 2009 (incluida una participación a la china Citic) para poder afrontar sus deudas tras el golpe de la crisis financiera. Finalmente, el año pasado, Qatar y Brookfield Properties compraron Songbird.
Los chinos huyen de su propia burbuja
El caso de este nuevo distrito financiero no es único. Las compañías chinas siguen inviertiendo en propiedades inmobiliarias en la capital británica, y van camino de inyectar 4.000 millones este año, batiendo el récord de 2015, según los datos de CBRE. De hecho, el Brexit incluso podría haber acelerado las inversiones gracias a la caída de la libra, si bien a largo plazo, si se mantiene la debilidad de la divisa británica, el efecto podría ser negativo para las inversiones, ya que su rentabilidad caería.
"Los inversores chinos están apostando a que el Reino Unido lo hará bien en las negociaciones sobre el Brexit, y si no, las compañías seguirán elegiendo Londres como su sede", explica Michal Marx, ex consejero delegado de la promotora U & I Group. "Londres no se convirtió en la capital financiera del mundo de un día para otro y ciertamente no perderá ese estatus tan rápido".
Las expectativas para Londres siguen siendo positivas, y de hecho muchos esperan que los beneficios del Brexit compensen los problemas que pueda acarrear. Por ejemplo, unos alquileres más bajos podrían atraer a más empresas asiáticas para colocar sus sedes internacionales en la ciudad, a pesar de que numerosos bancos, especialmente europeos, estén reduciendo sus actividades en la ciudad.
La lluvia de millones china no se limita a las oficinas, muchos inversores también aprovechan para buscar oportunidades en el mercado residencial, especialmente cuando cada vez hay más temor a una burbuja inmobiliaria en el gigante asiático.
"Estamos recibiendo preguntas de inversores que se habían mantenido al margen durante años. Han venido de repente. Aunque hay un pequeño descuento en la rentabilidad, ahora hay grandes rebajas gracias a la divisa", explica Rasheed Hassan, ejecutivo de la inmobiliaria Savills.
De hecho, muchos inversores chinos quieren aprovechar precisamente esa caída de la libra frente al yuan para invertir, ya que cualquier 'normalización' del cruce de las dos divisas implicaría pingües beneficios, más allá de la propia rentabilidad de la inversión.