Banca y finanzas

La gran banca logra mejorar su eficiencia en España pese a la bajada de los tipos

  • De media, las entidades cotizadas reducen su ratio entre costes e ingresos hasta un 36,7% 
  • BBVA supera al Santander y se anota como la entidad más eficiente en el negocio doméstico

Matteo Allievi
Madrid,

La bajada de tipos puesta en marcha por el Banco Central Europeo a lo largo del último año no impidió a las entidades financieras mejorar su eficiencia. El aumento del volumen de negocio, en particular en los ingresos por comisiones, junto a una menor sensibilidad a los tipos de interés y a un incremento controlado de la partida de gastos son los ingredientes del cóctel que permitieron a la gran banca española reducir el cociente entre costes e ingresos. En el primer semestre, las seis entidades cotizadas se anotaron una ratio de eficiencia del 36,5% de media frente al 37,3% del año pasado, al tener en cuenta su negocio doméstico.

La mejora de algo menos de un punto porcentual hasta junio supone un freno frente al avance de tres puntos que se anotó el sector en el año 2024. Aun así, el progreso en eficiencia sorprendió al mercado, que ante unos tipos más bajos había puesto en duda la capacidad de las entidades de reducir la ratio.

En su conjunto, el margen bruto se elevó casi en un 5% en su variación interanual, ya que el fuerte tirón de las comisiones logró compensar la reducción en el margen de intereses por efecto de la relajación de la política monetaria. Por su parte, los gastos subieron algo menos, un 3%, con una inflación que siguió bajo control pese a la incertidumbre azuzada por los conflictos geopolíticos y la guerra arancelaria.

Efecto del impuesto

La mejora de la eficiencia fue impulsada también por el nuevo diseño del impuesto a la banca. El anterior gravamen temporal, introducido por el Gobierno debido al gran aumento de las ganancias del sector por el alza de tipos, consistía en una tasa única del 4,8% a partir de 850 millones de ingresos anuales y, al recogerse en la partida de "otros ingresos y cargas de explotación", se restaba del margen bruto. Al ser este último el denominador de la ratio de eficiencia, el cálculo impulsaba la lectura de esta métrica hacia arriba.

Al contrario, el nuevo impuesto cuenta con un tipo progresivo entre el 1% y el 7% dependiendo de la base liquidable y, al recogerse en la partida del "impuesto sobre beneficios", se descuenta del beneficio neto. Además, las entidades están prorrateando el pago a lo largo del año para aliviar el impacto en sus cuentas financieras. El nuevo cómputo del impuesto a la banca ya no mengua el margen bruto cosechado entre enero y junio, como si ocurrió el año pasado, lo que favorece la mejora de la eficiencia.

El mercado considera que un nivel saludable de esta ratio se sitúa en torno al 50% o por debajo de este umbral, lo que implica que los bancos destinan 50 euros o menos en gastos por cada 100 euros de ingresos brutos. Santander, BBVA, CaixaBank y Bankinter presentan ratios inferiores al 40%, mientras que Sabadell y Unicaja están por encima.

Siguiendo la estela del primer trimestre, el grupo que impulsó más su eficiencia fue el presidido por Carlos Torres. La entidad bilbaína bajó la ratio en más de cuatro puntos, al pasar de un 35,58% al 31,30%, superando al Santander y siendo el banco más eficiente entre los seis cotizados, tomando como referencia únicamente el negocio en España. BBVA incrementó sus ingresos más de un 9% frente al año pasado, duplicando la media de crecimiento del sector, y fue la única entidad en conseguir disminuir sus gastos (casi un 4%), puesto que sus competidores vieron encarecer su factura.

BBVA reduce sus costes

En concreto, los costes de personal subieron un 0,8%, hasta 869 millones, pero la partida de "otros gastos de administración" vio una reducción del 12,8%, hasta 513 millones, aminorando el total. Desde hace más de un año, el vasco está inmerso en la opa sobre el Sabadell, que se encamina hacia la recta final, al estimarse que los accionistas del vallesano puedan acudir a la oferta en las próximas semanas. Ambos bancos han desplegado su artillería para convencer a los inversores de que su propuesta es la más valiosa y el hecho de que el vasco destaque como el único jugador del sector en reducir sus costes añade un brillo extra a sus cuentas.

El banco opado también supo balancear el aumento de gastos con el de ingresos, al crecer un 3,8% y un 4,4%, respectivamente. Su eficiencia se situó en un 42,51%, frente al 42,75% registrado el año pasado. Santander mantuvo su eficiencia estable en un 34% en España, por debajo del 41,5% cosechado en el conjunto del grupo debido al freno de mercados como Estados Unidos o Reino Unido, donde la ratio se situó en torno a un 50%. De todas formas, la cifra del grupo es la más baja que se anotó en los últimos 15 años.

CaixaBank se subió también al barco de los bancos que mejoraron la eficiencia, al bajarla en 0,4 puntos porcentuales, hasta un 38,60%. Son cifras que se refieren a la media de la ratio de los últimos 12 meses y que incluyen, además, el negocio portugués de BPI, ya que la entidad no desglosa los números por países.

Ligera subida de Bankinter

De su lado, Unicaja dejó sin cambios su ratio en un 44,5%, aunque bajó levemente desde el primer trimestre. Bankinter, en cambio, fue el único en incrementar su eficiencia, hasta un 35,77%, con una subida interanual de más de un punto porcentual, debido a un mayor aumento de costes frente a sus competidores (un 10,5% en el semestre).

La entidad liderada por Gloria Ortiz aclaró en su informe financiero que en 2025 se pretende que todos los trimestres tengan una estacionalidad similar para evitar fuertes concentraciones de gasto en la segunda parte del ejercicio, como venía ocurriendo en años anteriores, debido al peso de los incentivos variables obtenidos por los buenos resultados registrados. Aun con este ajuste, Bankinter permanece en el podio de los bancos con la mejor eficiencia en España, junto a BBVA y Santander.