Banca y finanzas

El precio del seguro de salud crece más del doble que el de autos en cinco años

  • Previo a la pandemia, los productos de protección sanitaria eran más baratos que los de coche 
Sanitarios en un hospital. iStock

Aitor Caballero Cortés

Los seguros de salud se han convertido en el producto genérico del sector más caro a mucha diferencia del segundo. Desde inicios de 2020, previos a la pandemia de Covid-19, hasta el pasado mes de mayo, los seguros de salud han incrementado su precio hasta un 44,5%, a razón de casi un 10% anual, según los últimos datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Esto supone un despunte con respecto al resto de productos aseguradores, que de una manera o de otra, han ido siempre con algo de retraso al IPC, el indicador general de precios en España. En total, según este organismo, los precios han crecido casi un 21%, por lo que los seguros de salud han aumentado su valor el doble de rápido que el resto de bienes y servicios.

La inflación ha afectado en gran medida a este producto, ya que los bienes sanitarios han sido de los que más han incrementado su precio. Pero especialmente ha sido el aumento de demanda el principal causante.

La pandemia ha firmado un antes y un después para las aseguradoras de salud, ya que desde entonces las suscripciones no han parado de crecer. En este lustro, se ha pasado de que el 23% de los españoles tuviera seguro de salud a un 26%, según Unespa, mientras la oferta en servicios también crece, pero no al mismo ritmo. La saturación de la sanidad pública y una mayor concienciación de los usuarios están detrás de las razones, según los principales estudios del sector, pero el sistema privado también tiene unas limitaciones.

Y es que además de ser una red asistencial mucho menor que la pública, la falta de profesionales también afecta a la sanidad privada, por lo que el aumento de pacientes también lo notan las listas de espera, a pesar de que este modelo sigue ofreciendo menor demora.

Pero lo que sin duda ha marcado el devenir de los precios de los seguros de salud es el aumento de siniestralidad. Todos los expertos apuntan a un cambio de tendencia en el uso del seguro, ya que ahora la frecuencia es mucho mayor. Se ha pasado de un 64% de siniestralidad a un 72% en apenas cinco años, según ICEA.

El caso de automóviles

También ha crecido el doble de rápido que los seguros de automóviles. Este seguro obligatorio para cualquier vehículo con permiso de circulación fue el primer afectado por el confinamiento, ya que la reducción de siniestralidad por la restricción de movimientos provocó bajadas en los precios.

Sin embargo, esto ha tenido un efecto rebote, acelerando su subida en especial en estos dos últimos años. Las aseguradoras alegan este crecimiento de precios a la actualización del baremo de lesiones, así como la inflación en los costes de las reparaciones y el aumento de siniestralidad de la vuelta de la pandemia.

Las compañías en primera instancia soportaron el estrechamiento de márgenes, y de ahí que el crecimiento en precios haya sido más concentrado, ya que los ratios combinados de este ramo –que mide la rentabilidad relacionando los ingresos por primas y los costes– estaban por encima del 100%, lo que indica pérdidas.

Ahora el sector está en un periodo de tratar de reducir esas subidas, aunque los puntos determinantes suelen ser los veranos, cuando las aseguradoras hacen ajustes por el incremento de siniestralidad ante la mayor movilidad y una gran concentración de renovaciones.