Banca y finanzas

Uno de cada tres fraudes al seguro es detectado por medios digitales

  • Hasta hace unos años, este porcentaje era tan solo del 3% 
  • AXA evitó gracias a la tecnología pagos fraudulentos de 27,6 millones 
  • El fraude por fenómenos climáticos sube del 2% al 9% en una década 
Foto: EFE

Aitor Caballero Cortés

Los avances tecnológicos han permitido a las aseguradoras detectar uno de cada tres casos fraudulentos, según ha informado AXA en la presentación del XI Mapa del fraude en España. Esto ha provocado un ahorro de 27,6 millones de euros a las compañías, algo que hace unos años era impensable, ya que del 33% de detección actual, antes apenas era del 3%.

Siempre se ha estereotipado que la sociedad española se basa en la picaresca, a pesar de que los datos no lo reflejen así. Y es que en 2023, la tasa de fraude a los seguros se ha mantenido estable en algo menos del 2%, un índice que repuntó en la pandemia, pero que desde 2021 se ha sostenido en niveles similares.

Sin embargo, aunque esta tasa de fraude esté estable, no sucede lo mismo con los precios. La inflación que padece España ha provocado un aumento de costes en las aseguradoras, y por ello también repercute en mayor manera en las cuentas de las compañías. Según AXA, evitaron pagos indemnizatorios fraudulentos en todos los ramos (vida y no vida) por valor de más de 84 millones de euros, frente a los 78,6 millones que se evitaron el año anterior. En 2012, donde la tasa de fraude era cercana al 1%, el importe salvado por las aseguradoras era de 62,1 millones.

La IA transforma la lucha contra el fraude

La aparición de la inteligencia artificial (IA) y su facilidad de uso ha hecho que esta sea otra arma más para cometer fraudes. Pero las aseguradoras también están aprovechando su potencial para justo lo contrario: detectarlos y recudirlos al mínimo. Esta tendencia no para de crecer, puesto que en 2022 los intentos fraudulentos detectados con medios digitales eran el 27%, 6 puntos porcentuales menos que en 2023.

Dentro de las tecnologías empleadas, las reglas automáticas son las más importantes. El año pasado, gracias a ellas se detectó el 19% de todos los casos y AXA ahorró casi 17 millones de euros, el 61,5% de los fondos que el total de los medios tecnológicos consiguieron evitar que se pagaran como indemnización fraudulenta.

Uno de los ejemplos que explican como la IA ha cambiado el panorama de los seguros lo explica Arturo López-Linares, director de siniestros de AXA: "en este caso, tras un pedrisco, un cliente hace llegar un siniestro a la compañía con una serie de fotografías del vehículo. Estas imágenes se encontraban editadas previamente para llevar a cabo el fraude, pero fue detectado gracias a nuestro uso de la IA", declaraba López-Linares.

Los fraudes por el clima se multiplican

A pesar de que la tasa de fraude está estable, los motivos por los que se intenta engañar al seguro sí que varían. En concreto, el clima es un factor fundamental que se utiliza como excusa para una reparación de daños. Estos han crecido desde el 1,9% del 2013 hasta el 9% en 2023, 7 puntos porcentuales más, aunque el pico fue en 2021 con un 11% como consecuencia de la borrasca Filomena.

Los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes, y eso está afectando a las aseguradoras provocando un desembolso mayor. Según su naturaleza, la lluvia ha sido la principal razón de intento de fraude (50,8%). Estos casos se han multiplicado por ocho en la última década, aunque otros como el viento (37,8% del total) también son cinco veces más frecuentes, y los casos de pedrisco-nieve (11,4%) han aumentado, pero a un ritmo más moderado.

En cuanto a la distribución geográfica de la evolución de los casos de fraude por eventos climáticos en los últimos años, el mayor incremento se observa en toda la costa mediterránea. Prácticamente, en todas las provincias costeras se ha producido un aumento de los intentos de fraude al seguro por estos motivos que van del 200%, al 800% en zonas como Murcia o Tarragona. Por su parte, en todo el este peninsular, pese a que también han aumentado los casos de intentos de fraude al seguro por causas meteorológicas, su evolución ha sido significativamente menor que en las regiones antes mencionadas.

Los fraudes se concentran en los autos

El área de la movilidad continúa siendo la principal fuente de fraudes en las aseguradoras, con el 54,8% de los casos. Esto es, principalmente, porque el seguro en el automóvil es obligatorio, y por ende, se multiplican los fraudes.

Donde los clientes intentan recibir indemnizaciones fraudulentas es por los daños materiales, los cuales ocupan el 77% de los casos y el 51% de las cuantías. Los daños corporales son el segundo factor más relevante (23%).

Estos fraudes son, en su mayoría, lo que se considera oportunista (57%). Este es aquel en el que se aprovecha un siniestro real para magnificar la cuantía a recibir aprovechando daños preexistentes. El importe medio de este fraude es de 600 euros. Los otros corresponden a fraudes premeditados (39,4%), el cual intenta delinquir ya sea aprovechando un siniestro real o ficticio y, por último, a las tramas organizadas, que apenas llegan al 3% de los casos.