Laporta corteja a Apollo y Metlife con la financiación verde del Camp Nou
- Convierte en verdes los bonos del nuevo Espai Barça con tal de seducir a los comités de sostenibilidad y rebajar algo el interés
- El FC Barcelona tendrá el único estadio de Europa con doble certificación
Carles Huguet
Barcelona,
Goldman Sachs y JP Morgan tienen una misión: encontrar los 1.500 millones necesarios para el nuevo Camp Nou al menor precio posible. En las oficinas del FC Barcelona se asume que la realidad hoy es muy diferente a la de hace apenas dos años, cuando los tipos de interés estaban al 0%. El coste de la deuda será superior al que hubiera sido si el proyecto se hubiera lanzado antes de la pandemia, pero el conjunto azulgrana trata de esgrimir criterios sostenibles ante sus inversores americanos para rebajar la renta en algún punto, que a la postre se traducirá en decenas de millones.
La junta que encabeza Joan Laporta se ha reunido en varias ocasiones con un grupo de fondos estadounidenses entre los que están las gestoras Apollo, Pricoa Private Capital y Voya Financial y de las aseguradoras Metlife, New York Life y Barings. Tanto en territorio norteamericano como en Barcelona. Los comités de estas firmas tienen ya que medir su inversión también en criterios de sostenibilidad, que pueden hacer variar el interés final al que concedan sus recursos. Cada vez son más las financieras que operan bajo criterios ESG y que lanzan fondos que solo pueden inyectar dinero en proyectos sostenibles.
Para seducirlos, el conjunto azulgrana ya anunció la semana pasada que Morningstar Sustainalytics había calificado como Greenbonds las tres emisiones de bonos de 500 millones de euros cada una que el club tiene entre manos. La entidad está a punto de conseguir la certificación LEED Silver y la BREEAM Very Good -dos de los indicadores del mercado-, lo que convertiría al nuevo Camp Nou en el único estadio con doble evaluación de sostenibilidad de Europa, como ha podido saber elEconomista.es.
El Barça pretende instalar 30.000 metros cuadrados de placas solares en la nueva cubierta
Entre los grandes hitos, el Barcelona pretende instalar 30.000 metros cuadrados de placas solares en la cubierta para generar energía fotovoltaica, lo que también obligará a instalar andamios para acceder a algunas localidades durante la parte final de la construcción.
Con las notas, el club aspira a comercializar los bonos bajo criterios de sostenibilidad, lo que le permita rebajar el coste de la deuda. Saben que el 2,5% de interés que paga el Real Madrid desde 2019 por su emisión es inigualable, pero todo ayuda. Tanto para rebajar el pago como para conseguir nuevos interesados en la financiación.
La adjudicación del Camp Nou a Limak
Esperan que sirva para compensar las dudas que haya podido despertar la adjudicación de las obras a la constructora Limak. En las oficinas de algunos inversores extrañó la elección de la firma turca por delante de las propuestas de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) y la alianza entre Ferrovial y Acciona. Ambas llevaban más de un año con el proyecto.
No parece que ningún fondo vaya a retirarse de la financiación, pero las fuentes consultadas sí señalan que podría encarecerse. "La elección de Limak no es motivo para echarse atrás, pero está claro que no suma", explican.
"¿Por qué Limak? Porque el planning de obra se ajusta a los plazos que pedíamos, porque su modelo constructivo apoya esta planificación. Porque han aceptado las condiciones contractuales. Son condiciones mucho más exigentes que el estándar en el mercado, justifica Laporta.