La COVID-19 destruye 28.000 empleos en Aragón

La ocupación ha caído en el último año en la comunidad aragonesa en 27.900 personas. La destrucción de empleo ha sido más significativa en los hombres, donde se han perdido 18.400 puestos de trabajo, cifra que baja hasta los 9.600 puestos en el caso de las mujeres.

Aragón no se ha librado del impacto de la COVID-19 en el mercado de trabajo, registrando una caída de la ocupación en 27.900 personas en el último año, lo que supone un descenso del 4,7%.

Un porcentaje que es superior al registrado en el conjunto de España -caída del 3,5%-, y que sitúa a la comunidad aragonesa como la tercera región donde más ha descendido la ocupación en términos interanuales, siendo tan solo superada por Canarias y Baleares con descensos del 8,1% y del 7,4%, respectivamente. Además, se rompe la tendencia de crecimiento de la ocupación registrada en los últimos seis años, quedándose la ocupación en 567.000 personas de las que 309.400 son hombres y 257.800 son mujeres.

La afección en el desempleo ha sido desigual atendiendo al género. La COVID-19 ha tenido un mayor impacto en los hombres, ya que se han perdido en este caso alrededor de 18.400 empleos, lo que supone una caída del 5,6%. En las mujeres el impacto también es significativo, pero inferior que en el caso de los varones: la destrucción de empleo es de 9.600 puestos, lo que representa una caída del 3,6%.

Estos datos implican que dos de cada tres puestos de trabajo que se han destruido con la pandemia estaban ocupados por hombres. Una tendencia en Aragón que es similar a la registrada en el conjunto de España aunque, en esta comunidad está más acentuada, puesto que es la tercera autonomía en la que más empleo masculino se ha destruido, según el VIII Monitor Anual Adecco de Ocupación, que ha sido realizado por Adecco Group Institute.

Por edades, también se observan diferencias. El mayor impacto de la COVID-19 se ha dejado sentir en el empleo adulto. El número de ocupados aragoneses mayores de 25 años ha descendido en el último año en 26.200 personas, lo que supone una disminución del 4,7%. A nivel nacional, la caída se ha situado en el 2,6%. El dato de Aragón es el tercer peor entre las autonomías. Además, más del 90% del empleo perdido estaba ocupado por mayores de 25 años.

En el caso de los menores de 25 años, la situación cambia. A pesar de que se ha producido un descenso en 1.700 empleos, es decir el 5,2% menos, Aragón se convierte en la tercera autonomía con el menor resultado en esta franja de edad. Es significativo a su vez que en el colectivo de mujeres jóvenes no se ha destruido empleo, estando los 1.700 empleos perdidos ocupados por hombres.

El mercado de trabajo aragonés también refleja otras características diferentes en relación al conjunto de España en cuanto a la creación de empleo. En este sentido, destaca que en Aragón solo se han creado puestos de trabajo entre las personas con educación primaria, con un aumento interanual del 9,5%, y con los que tienen la segunda etapa de la secundaria o FP, con un crecimiento del 4,2%.