Al cierre de la semana lo destacable es que finalmente los principales índices europeos se han aproximado muchísimo a puntos de giro potenciales y primeros soportes como son la tangencia con la directriz alcista que guía las subidas desde el pasado 20 de noviembre.
En el IBEX 35 esta línea de tendencia discurre por las inmediaciones de los 9300 mientras que en el Eurostoxx 50 aparece en la zona de los 2450 puntos.
En la medida que los precios se siguen manteniendo por encima de sus directrices alcistas, no vemos motivos para no seguir pensando que la actual caída de corto no es más que una simple fase correctiva que está sirviendo para aliviar la sobrecompra y ajustar parte del tramo alcista iniciado por la renta variable en los mínimos del pasado 29 de diciembre, fecha en la que el IBEX 35 alcanzó los 8955 puntos, tras la cual las subidas podrían retomarse.
Un escenario de alzas adicional es el más probable en próximas fechas y solamente la aparición de alguna figura de vuelta bajista lo suficientemente amplia o si se pierde la referencia de soporte crítica que de forma general se puede situar en los mínimos del pasado 29 de diciembre, nos haría variar este análisis, si bien es cierto que si la semana que viene las caídas tienen continuidad y los índices se sitúan por debajo de sus directrices alcistas, tendríamos un claro aviso de que algo no va bien y habría que valorar la posibilidad de que la tendencia bajista principal pudiera reanudarse.