En el ecuador de la sesión asistimos a una jornada en lo que lo destacable es, de momento, ver como el IBEX 35 es incapaz de seguir la estela alcista de sus homólogos europeos. Si la semana pasada destacaba porque era capaz de seguir avanzando mientras el resto de índices se mostraban divergentes, hoy es justo al revés.
En efecto, el selectivo español, lastrado por el mal comportamiento del Santander y BBVA, ha buscado apoyo en niveles donde cerró el viernes pasado y parte baja del hueco alcista abierto hoy en la apertura. Asistir al cierre de este hueco, esto es, a un cierre por debajo de los 9340 puntos, sería una señal de debilidad importante que iría en la línea que manejamos, de que todavía es pronto para poder dar por terminada la fase bajista iniciada el miércoles pasado y que, cuando menos, debería servir para ajustar parte del rebote iniciado en los mínimos de hace dos semanas y que aún no se puede descartar que pueda llevar al índice a marcar nuevos mínimos del ejercicio si el recuento de onda que venimos manteniendo es correcto.
El primer paso para que se pueda seguir favoreciendo esto último como escenario más probable, en caso contrario estaríamos errados, es que eventuales alzas no sean capaces de llevar al selectivo español por encima de los 9800 puntos al cierre. El siguiente sería que el actual ajuste fuera capaz de llevar al IBEX 35 por debajo de lo que serían niveles de corrección proporcionales del 61,80/66% de todo el rebote, esto es, los 8500 puntos. Niveles análogos ya han sido alcanzados en los principales índices de Wall Street, donde han rebotado por el momento.