Jornada de achique
Situación de corto plazo:
Logró finalmente sobreponerse a las ventas el mercado norteamericano, consiguiendo incluso cerrar en positivo en alguno de sus índices y, lo que es más importante, alejándose de los mínimos de la jornada previa en todos ellos para evitar un deterioro que, atendiendo a la relación dólar/yen, no queda claro. No al menos más allá de la necesidad de un ajuste a la sobrecompra que hemos mantenido como escenario más probable antes de la corrección que abría el mercado tras la rebaja de un cuarto de puntos en los tipos por parte de la Reserva Federal norteamericana (Fed). Fue una jornada, por tanto, de achique de las presiones bajistas surgidas en las últimas horas.
Seguimos en un movimiento lateral, estrechado en sus rangos a muy corto plazo tras la recaída; y que tiene en el Russell 2000, probablemente, el más claro de los termómetros del estado técnico del mercado. Ayer, al cierre, no quedó claro que haya habido un deterioro técnico significativo aunque hay que decir que, según los cronistas de Wall Street, lo acontecido esta semana es algo realmente anormal. Parece haber sucedido cuatro veces desde 1.994. En tres de las cuatro ocasiones el mercado tuvo que perder terreno antes de recuperarse.
Situación tendencial:
Mientras se mantengan los mínimos de marzo del S&P 500, que se mostraron en verano como la zona clave a la hora de dar credibilidad definitiva al a una situación bajista en tendencia, la tendencia de fondo es alcista aunque aún no pueda hablarse se subida libre.
