Wall Street acentúa su corrección y el nerviosismo aparece
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Un vistazo a las bolsas mundialesLa fortaleza exhibida el martes por Wall Street después de los máximos históricos hacía pensar en una continuidad inmediata de las subidas, pero era perfectamente lógico que se prolongara la corrección. Después de todo, la subida acumulada tras la bajada de tipos ha sido impresionante. Y eso es lo que ocurrió ayer, que los índices profundizaron su caída.
El Dow Jones recortó el 0,56%, el S&P 500 se dejó algo menos, el 0,47%, y el Nasdaq encabezó los descensos igual que había encabezado las subidas previas: cayó el 0,64%.
Así pues, nada grave, como tampoco lo sería ver algo más de descenso. Lo que sí preocupa un poco más es la inquietud que se empieza a respirar en Wall Street ante el decisivo dato de paro que se publicará mañana viernes. Analistas e inversores empiezan a mostrar temor al impacto que puede tener: si el dato de agosto fue el detonante de la bajada de tipos, la cifra de septiembre puede provocar un nuevo terremoto. La idea es que, si sale bueno (se espera la creación de 115.000 empleos), la Fed no volverá a bajar tipos.
Ayer las referencias volvieron a ser negativas, como casi todos los días. El ISM de servicios cayó más de lo esperado, hasta 54,8 puntos.
Las noticias empresariales tampoco ayudaron. La empresa de chips Micron publicó unas inesperadas pérdidas por la caída de precios provocada por el exceso de ofertas; el valor cayó el 8,9% y arrastró a Intel, que cedió el 2,3%. AT&T cayó el 1,2% porque su competidor Verizon presentó un teléfono competidor con el iPhone de Apple, con el que AT&T tiene un contrato exclusivo.
En otros mercados, el petróleo se mantuvo estable en la zona de 80 dólares (79,97) a pesar de que las reservas de crudo subieron inesperadamente en EUU. El dólar tampoco registró grandes movimientos. Por último, los bonos prosiguieron su movimiento lateral: si el martes subieron, ayer volvieron a bajar en precio, con lo que su rentabilidad subió de nuevo al 4,79%.