Situación de corto plazo:
Comentábamos ayer que esperábamos una cesión del mercado norteamericano para, de inmediato, ver precios marcando nuevos altos que permitan al S&P 500 alcanzar sus máximos históricos. La sesión de ayer no cambio esto sino que ratificó la primera parte del escenario. La jornada de hoy, por tanto, debería dar lugar a ganancias para no modificar un escenario que parece peligrar sólo por el lado de un Dow Jones Transportes que sigue sin romper al alza y que, de no resolverse del lado comprador, dificultará el intento del Dow Jones Industrial de sostenerse por encima de los máximos del año.
El sentimiento tal y como lo mide Investors Intelligence, hecho público ayer, está en una zona alta, tan alta como para forzar un techo del mercado si tenemos en cuenta que, aunque no presenta lecturas extremas, todos los techos consolidativos del mercado desde 2003 han sido señalados cada vez por niveles más bajos del indicador que mide el diferencial entre advisors alcistas y bajistas en Wall Street. El sentimiento sería por tanto algo que apoyaría la divergencia del Dow que sigue mostrando el Transportes. El resto de cuestiones, tendencia, volatilidad y otras correlaciones, apoyan a los alcistas.
Situación tendencial:
La tendencia de medio y largo plazo tiene la calificación de alcista, toda vez que los máximos y mínimos relativos tanto en base semanal como en mensual siguen siendo ascendentes. Aunque sea preocupante la última vela mensual de julio en los índices estadounidenses, analíticamente, sobre todo tras la aparente reconstrucción alcista que estamos viendo, todavía es pronto para poder hablar de un techo de medio plazo. Los mínimos de marzo del S&P 500 se han mostrado como la zona clave a la hora de dar credibilidad definitiva al a una situación bajista en tendencia.