Nueva semana de consolidación, en la que los precios se mantienen dentro de un patrón triangular, rechazados continuamente desde la zona de demanda en cada intento de vuelta bajista, pero incapaces de reafirmar la voluntad de una sola vela compradora. Así, el patrón desplegado al cierre supone dejar una vela que puede ser interpretada tanto en sentido continuista como en sentido bajista; no en vano es la misma que se dejó en la zona de 2.900 antes del fuerte movimiento bajista que vimos en la parte central de la semana. Sobra decir que la salida dependerá, finalmente, de lo que suceda en Wall Street; así que no le den más vueltas...