Al cierre, gran semana para el Ibex 35 y cinco días de pérdidas en conjunto para el resto de nuestra bolsa. La situación supone repetir, paso por paso, el movimiento lateral de los meses de junio y julio en el Ibex 35, y esa es la esperanza de un mercado incapaz de seguir su estela. Hoy, como entonces, el Ibex de pequeñas empresas se mueve a la baja mientras el Ibex 35 consolida con cierta pendiente alcista, lo que en principio es síntoma de fortaleza.
La ruptura de los 12.000 puntos en el Ibex en cierre semanal no supone por tanto la superación de las dificultades técnicas, y aún menos sugieren un mercado listo para un tramo sostenible al alza tras tres meses de correcciones. Para algo así, como ya pasó en julio, deberá reaccionar toda la renta variable y no sólo el Ibex 35, por lo que será necesario un cierre por encima de los 7.600 puntos en el Ibex de pequeñas empresas para que los alcistas puedan cumplir con sus deseos.