El milagro que no tiene fin

Si nos cuentan que el Eurostoxx 50 va a desplegar y confirmar en tangencia con resistencia creciente un doble techo tras la ruptura -cuña- hubiéramos pensado que ya era suerte poder afianzar tan claramente un cambio de sesgo a muy corto plazo. Si nos dicen que además se va a romper con hueco nos hubiéramos frotado las manos. A pedir de boca. Tras dos jornadas, y pese a que la de ayer fuera una jornada que dejó mucho que desear en términos de volumen, hay que decir que los alcistas han abrasado a los bajistas.

Cerrando por encima del hueco, e incluso por encima de la banda que representa el 61,8/66% de la caída de las jornadas previas gracias al estirón de última hora, los alcistas mandando un contundente mensaje que se contrapone completamente a nuestras expectativas para el más corto plazo: no hay deseo de una corrección digna de mención. Así, el mercado parece dispuesto a irse de nuevo a por la resistencia creciente anulando el patrón en doble techo que puede verse en el gráfico adjunto.