Después de diez sesiones se resolvió el lateral que definían los principales índices norteamericanos en el corto plazo. Finalmente ganaron la partida los bajistas por lo que el proceso lateral en vez de ser una pauta de consolidación previa a mayores alzas acabó siendo una figura de vuelta.
Situación técnica:
La pérdida de los 9200 puntos en el Dow Jones Industrial y los 990 puntos en el S&P 500 confirmaron ayer lunes sendos patrones bajistas que permiten favorecer que los máximos de la semana pasada fueron un techo en las subidas de las últimas semanas y el punto de origen de una corrección que probablemente servirá para ajustar parte de los ascensos iniciados el pasado 8 de julio.
Especialmente destacable fue el amplio hueco bajista que abrió el S&P 500 y sobretodo los tecnológicos Nasdaq. Estos huecos, que pueden ser considerados como de ruptura puesto que provocaron la cesión de soportes clave, nos pueden servir como referencia para saber si el control de la situación de corto plazo la tienen los bajistas o, por el contrario, los alcistas vuelven a recuperar el mando. De ello dependerá si en un próximo rebote este hueco sigue abierto o es cerrado respectivamente.
Los objetivos mínimos que marcan los distintos patrones de techo nos parecen poca corrección y vemos probable que al menos asistamos a caídas que sirvan para ajustar un 38,20 o 50% de todo el tramo alcista descrito. Les estamos hablando de entornos de 8755/900 en el Dow Jones Industrial o los 943/61 en el S&P 500, que además coinciden con antiguas resistencias y ahora soportes como son los máximos de junio pasado.
Situación tendencial:
El movimiento alcista ha quedado confirmado y con él empieza a tomar cuerpo nuestra "C de Barack". Podemos confiar más en la idea de que los mínimos de marzo han dado paso a un mercado alcista secular.