Cuando no se pueden superar resistencias, como eran los 927 puntos en el S&P 500, lo normal es que los precios busquen apoyo nuevamente en soportes y esto es lo que los principales índices norteamericanos han hecho.
Situación técnica:
Era previsible que el Dow Jones Industrial y el S&P 500 fueran a buscar apoyo en los mínimos de hace dos semanas; niveles que se han convertido en la línea que separa un escenario lateral de uno bajista en lo que a plazos cortos se refiere. También era probable que intradía esos soportes clave fueran perdidos pero lo que no estaba del todo claro era lo que podía suceder a partir de entonces.
Pues bien, lo que sucedió es que los alcistas volvieron a dar una nueva lección de fuerza y fueron capaces de superar el envite bajista. Las líneas de vela desplegadas en soporte son potencialmente alcistas pero para alejar a corto el riesgo bajista es imprescindible que hoy martes la presión compradora logre que el Dow Jones Industrial y el S&P 500 acaben claramente en positivo, generando una vela blanca que confirme el reversal que tuvimos ayer lunes. Todo lo que no sea eso olería mal y haría aumentar las dudas que no se disiparán del todo mientras eventuales alzas no rompan los máximos de la semana pasada. Si eso ocurre habrá que olvidarse del riesgo de asistir a una corrección en profundidad y todo apuntaría hacía la continuidad en la tendencia alcista iniciada en los mínimos de marzo.
Situación tendencial:
Seguimos pensando en que marzo marcó el final del ciclo bajista, pero un alza como la vista bien merece correcciones pese a ello y es lo que estamos viendo. La posibilidad de un nuevo tramo alcista que permita máximos crecientes ha ganado entero pero no dejaría por ello al mercado limpio. Tras un alza como la vista, el mercado sólo será campo fértil en tendencia tras una corrección en tiempo o profundidad.