Las obras en el Barranco de la Muerte en Zaragoza finalizarán en julio para evitar los efectos de las tormentas

Las obras en el canal perimetral en el Barranco de la Muerte de Zaragoza encaran su recta final. La previsión es que finalicen el próximo mes de julio, momento en el que se pondrá punto y final a las afecciones producidas por las tormentas en la zona de Parque Venecia, además de tratar de prevenir posibles efectos por futuros por fuertes lluvias.

Las obras comenzaron el pasado mes de febrero con el fin de incrementar el nivel de seguridad frente a episodios excepcionales de las tormentas a manos de la empresa Áridos y Excavaciones Carmelo Lobera SL, con una dotación económica de 1.095.368,23 euros. Una partida que se ha destinado, en concreto, a crear un canal de dos metros de profundidad, 24 metros de anchura y más de 300 metros de longitud.

En estos momentos, los trabajos se están centrando en la composición de las 10.000 losas de piedra que conforman la escollera que recubre los bordes del canal y ya se dibuja el depósito de amortiguación final junto a la Z-30 que ha sido encofrado.

La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha visitado la zona de las obras para conocer el estado de la actuación en esta parte de la capital, en la trasera del CEIP María Zambrano y el Cuartel de la Policía Local del barrio de Parque Venecia.

Chueca ha explicado que los trabajos estarán "completamente acabados", incluyendo biondas y mobiliario, a finales del mes de julio. A partir de esta fecha, los técnicos del área de Urbanismo proseguirán con el resto de proyectos de infraestructuras complementarias en el barranco.

Con estas obras, y con el cambio de la boca del colector (tubería municipal que recibe el agua pluvial y la remite a la EDAR para su tratamiento) por una más grande de 1,8 metros de diámetro para captar más agua y evitar que circule por la superficie, toda el agua de las fuertes tormentas excepcionales que no entre en este colector, será derivada por la nueva infraestructura hasta la Z-30, línea natural de evacuación. De este modo, se evitará el paso directo por el barrio de Parque Venecia.

Además, en el tramo final, se está creando una obra de amortiguación formada por un vertedero escalonado, que conecta con otro colector existente de 1.800 mm de diámetro. Esta infraestructura está en fase de hormigonado. Con su ejecución, se minimizará el impacto directo del agua sobre la Z-30.

También a lo largo de este año, se irán llevando a cabo las obras recogidas en el convenio de colaboración con el Gobierno de Aragón para impulsar nuevas medidas de minimización del riesgo de inundación provocado por el desbordamiento del Barranco de la Muerte y que cuenta con financiación de la multinacional AWS, para avanzar de manera exponencial en las infraestructuras hidráulicas.

A las obras municipales del canal perimetral se sumarán tres grandes fases de ejecución que aborden de manera global la cuenca hidrográfica del Barranco de la Muerte. Se actuará para reducir los riesgos sobre la inundación en la Z-30 y las zonas anexas.

Así se construirán los depósitos de tormentas junto al Cementerio de Torrero, se harán cinco nuevos diques de laminación (cuatro en el barranco de la Muerte y uno más en el de Camino de Arráez), y se acondicionarán y mejorarán los diques de laminación superiores aguas arriba de la Z-40 en el barranco del Camino de Arráez.

También se soterrará el Barranco de la Muerte en la Z-30 mediante un colector, con el propósito de duplicar la capacidad actual y la eficiencia del sistema de drenaje y mitigando significativamente el riesgo de inundación en esta zona crítica. De este modo, se creará una nueva tubería de alta capacidad para recoger el agua vertida al final del canal perimetral en construcción actualmente para trasladarla fuera del área, a 1,2 km de distancia.

A todas esas actuaciones, se sumarán al sistema de sensorización y alerta de 28 cuencas, también financiado por AWS, que engloban 634,64 kilómetros de superficie en el término municipal. Con este paso, se mitigarán los riesgos asociados a fenómenos naturales, desbordamientos de agua, deslizamientos de tierra, incendios, temperaturas extremas y otros peligros que puedan afectar a las comunidades aledañas y al entorno natural.

La inversión económica de AWS en Zaragoza, repartida en tres anualidades, alcanzará los 13.845.471,66 euros. La compañía, además de la aportación económica, también empleará su tecnología para aprovechar los datos en tiempo real y el análisis a través de la inteligencia artificial para transformar Zaragoza en un municipio faro en Europa, comprometido con la sostenibilidad en las Smart Cities, y ejemplo de ciudad inteligente frente a eventos climáticos extremos.